Salomón Cornelio/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- La empresa Proagro arrancó con los trabajos de evaluación de daños en 15 mil hectáreas de cultivos de caña en la ribera del río Hondo, que la Asociación Local de Productores de Caña de Azúcar reportó como siniestradas por la sequía.

Benjamín Morales Reyes, líder de la Asociación Local de Productores de Caña de Azúcar, confirmó que personal de la empresa de Seguros Protección Agropecuaria (Proagro) ya realiza trabajos de campo en 12 ejidos cañeros del sur de Quintana Roo.

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Informó que de acuerdo con las proyecciones, en caso de ser procedente, los productores de caña de azúcar cobrarían el seguro catastrófico dentro de tres meses a más tardar.

Señaló que se conformaron equipos de trabajo para realizar recorridos de campo con los representantes de esa empresa en las parcelas de los diferentes ejidos, a fin de que se realice una correcta validación de los daños, pues de ello depende el cobro del seguro.

Comentó que los productores tratarán de cumplir con todos los procedimientos y reglas de operación que pide la empresa Proagro, para acceder a ese seguro que, aunque no será la solución al problema, ayudará a mitigar los impactos económicos en tanto llega la próxima zafra.

“Vamos a insistir para que la empresa aseguradora realice la cobertura total de la superficie siniestrada por esta sequía”, dijo.

Explicó que por el momento la empresa está cumpliendo con atender el reclamo de los cañeros, con el levantamiento de los reportes para poder responder con los pagos.

Dijo que es difícil hacer las estimaciones sobre el monto de las indemnizaciones que se pagará por el seguro catastrófico porque dependerá del tiempo y de la variedad del cultivo de la caña de azúcar.

Afirmó que este es un punto muy importante que se tiene que atender con los representantes de la aseguradora para no dejar al productor en desventaja al momento de hacer las estimaciones.

Recordó que la pérdida para cerca de tres mil productores se estima actualmente en cerca de 250 millones de pesos, pero consideró que de continuar el mal tiempo los daños económicos podrían ser mayores porque podría aumentar la superficie afectada.