Los microplásticos son pequeñas partículas de plástico que miden menos de cinco milímetros de tamaño, se encuentran por todas partes, y varias investigaciones arrojan su que se encuentran en lugares extraños. Cabe mencionar que el agua que tomamos y los alimentos que ingerimos contienen microplásticos, por ello no resulta asombroso que los científicos hayan encontrado microplásticos en las heces de los animales y personas.

Un estudio piloto publicado por la revista Environmental Science & Technology Letters, dice que un grupo de científicos revela los resultados de un actual análisis en el que se compararon las cantidades de distintos tipos de microplásticos en la secreción de los bebés y adultos.

Aún se desconoce qué efectos puede causar los en la salud, pero científicos han mencionado que lo microplásticos pasan de manera inofensiva a través de tracto gastrointestinal y se eliminan sin problema. Sin embargo los estudios más recientes sugieren que las piezas más pequeñas podrían atravesar las membranas celulares y pasar por el torrente sanguíneo. Está comprobado en cultivos in vitro y animales de laboratorio que la exposición a microplásticos puede ser un factor de muerte celular, inflamación y trastornos metabólicos.

Un grupo de investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de Nueva York cuantificaron la exposición de dos tipos de microplásticos comunes:
Tereftalato de polietileno (PET) y Policarbonato (PC). Calculando los niveles en las heces de bebés y adultos.

Detectan más microplásticos tipo PET en los bebés

Se realizó una espectrometría de masas para determinar las concentraciones de PET y PC en seis muestras de secreción de bebés, diez adultos y tres muestras de recién nacidos. El resultado de este estudio menciona que todas las muestras contienen al menos un tipo de microplástico. Además el promedio de PC en las muestras fueron muy similares en los bebés y adultos, aunque las heces de los bebés contaban con 10 veces más la concentración de PET que en los adultos.

Según los investigadores, es muy probable que los bebés presentan más concentración de microplásticos por el uso de biberones, mordedores y juguetes. Aunque se necesitan estudios más extensos para determinar este descubrimiento.

Con información de “Muy Interesante”

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