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LOS ÁNGELES, Estados Unidos.- La mayoría de las personas nos atascamos en momentos peliagudos de nuestra vida, pero en algunos casos la cuestión es que nos apegamos tanto a los que nos preocupa, que quizá no prestamos la adecuada atención al impacto que tendrá esta decisión en el futuro.

De acuerdo con el portal Univisión, una técnica muy sencilla –al menos, en apariencia– para salir del atasco lleva el nombre 10/10/10, y la propone Suzy Welch, periodista económica y autora de best sellers.

Se trata de ver cuáles serán las consecuencias de nuestra elección en el largo, corto y medio plazo –es decir, lo que sentiremos en tres momentos diferentes– con tres preguntas clave:

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Visto en retrospectiva, es fácil observar cómo algunas de las cosas ante las cuales nos atormentamos en el pasado no eran para tanto, y cómo podríamos habernos ahorrado tantos desvelos.

El mejor momento para decidir

Tras investigar el comportamiento de los jueces –profesionales que se ganan la vida decidiendo– los psicólogos llegaron a la conclusión de que tienes más posibilidades de seguir entre barrotes si tu juicio se celebra por la tarde.

Cuando ya no puede más, el cerebro opta por uno de estos dos atajos:

• Se convierte en un irresponsable y actúa impulsivamente o
• No hace nada, y evita tomar decisiones.

Estamos ante la llamada “fatiga de las decisiones”, una teoría que indica que disponemos de un almacén finito de energía mental disponible para decidir y para el autocontrol.

Si te pasas el día evitando el chocolate o las papas fritas, serás menos capaz de decir que no a otras tentaciones, sin importar cuál sea su calado. De forma que ya sabes: antes de decidir, descansa.