Descubren en Túnez al mayor lagarto gusano gigante del Eoceno
El reptil prehistórico, de más de 90 cm, desafía ideas sobre los anfisbenios y revela un ecosistema diverso del Eoceno en África.
En el Parque Nacional Djebel Chambi, en el oeste de Túnez, paleontólogos han descubierto los restos de Terastiodontosaurus marcelosanchezi, una nueva especie de lagarto gusano que se convierte en el anfisbenio más grande registrado hasta la fecha.
Este reptil prehistórico, que vivió durante el Eoceno, medía más de 90 centímetros de largo y presenta características únicas que desafían las expectativas sobre los anfisbenios modernos, conocidos por ser pequeños y habitar bajo tierra.
Según un estudio publicado en el Zoological Journal of the Linnean Society, Terastiodontosaurus destacaba por sus potentes mandíbulas y dientes con esmalte grueso, ideales para triturar conchas de caracoles, su principal fuente de alimento.
A diferencia de sus parientes actuales, esta especie habitaba mayormente en la superficie, adaptándose a un clima cálido que favorecía el desarrollo de reptiles gigantes.
El descubrimiento de esta especie es significativo, no solo por su tamaño, sino por sus implicaciones evolutivas. Terastiodontosaurus pertenece a los trogonófidos, una familia de anfisbenios caracterizada por su dentición acrodonta. Este hallazgo amplía el conocimiento sobre los anfisbenios extintos en África, siendo solo la quinta especie registrada en el continente.
Un hallazgo que redefine la evolución de los anfisbenios
Los fósiles se encontraron en Chambi-1, un yacimiento rico en restos de diversos animales del Eoceno. Este entorno fluvio-lacustre albergaba una biodiversidad impresionante, que incluía tortugas, cocodrilos, aves y mamíferos.
El nombre de la especie rinde homenaje al paleontólogo Marcelo Sánchez-Villagra, reconocido por sus contribuciones a la biología evolutiva. Georgios Georgalis, autor principal del estudio, destacó que el hallazgo no solo reescribe la historia de los anfisbenios, sino que también subraya la importancia de continuar explorando el patrimonio paleontológico africano.
Este lagarto gusano gigante no solo representa un logro en la paleontología, sino que es una ventana fascinante a un mundo perdido donde los reptiles desafiaban los límites evolutivos.
(Con información de Muy Interesante)