El 26 de marzo de cada año, se conmemora el llamado ‘Día Púrpura’ o ‘Día Mundial de la Epilepsia’, es una fecha establecida para tomar conciencia y disipar mitos sobre este trastorno cerebral que afecta a 60 millones de personas.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), cerca del 1 por ciento de la población mundial padece epilepsia.

¿Qué es la epilepsia?

Es un trastorno del sistema nervioso central, concretamente del cerebro. 

Pueden causarlo diversos factores como pequeñas lesiones cerebrales, tumores, accidentes cerebrovasculares y predisposición genética.

De acuerdo con la OMS, cerca del 1 por ciento de la población mundial padece epilepsia. (Foto: Canva)

Los pacientes sufren descargas eléctricas excesivas en el cerebro que afectan la actividad normal de las neuronas y provocan crisis epilépticas (espasmos musculares, movimientos incontrolables, alteración y pérdida de la conciencia y convulsiones).

La frecuencia de las crisis puede ser escasa o producirse más de una vez al día y pueden durar segundos o minutos. 

Si la crisis persiste durante más de 5 minutos, se recomienda hospitalización. También si tiene otra convulsión tras la primera o si sufrió alguna lesión.

Acceso a información médica y atención oportuna 

El primer paso en esta toma de conciencia es reconocer la importancia de abordar esta problemática con enfoque que coloque al paciente y su estado emocional en el centro de todas las acciones.

También es crucial promover el diagnóstico temprano y la atención oportuna.

El acceso a información médica de calidad y a los recursos adecuados marca una diferencia significativa y vital en pacientes y familias.

Datos interesantes acerca de la epilepsia

Evita contener los movimientos de una persona que convulsiona. No le pongas nada en la boca, pues podrías lesionarle los dientes o la mandíbula.

La epilepsia afecta a cualquier edad, pero frecuentemente aparece en niños y adolescentes (el 75 por ciento de los casos).

Este trastorno puede controlarse con tratamientos, desde medicamentos hasta cambios en la rutina diaria e, incluso, cirugía para reducir o eliminar las crisis.

Aquellos con epilepsia, sufren descargas eléctricas excesivas en el cerebro que afectan la actividad normal de las neuronas. (Foto: Canva)

Existen soluciones que pueden mejorar la calidad de vida de los pacientes, aumentando la adherencia al tratamiento y reduciendo los costos.

Un 80 por ciento de los pacientes con epilepsia que viven en países de ingresos bajos y medianos no recibe el tratamiento adecuado.

Con información de Reforma