Estudio revela cómo el núcleo terrestre afecta la duración del día
Científicos de ETH Zürich descubren cómo los procesos internos impactan las variaciones en el tiempo de rotación del planeta.
La duración de un día en la Tierra, establecida en 24 horas, no es tan fija como parece. A lo largo de las décadas, siglos e incluso milenios, esta duración fluctúa levemente debido a diversos factores.
Un reciente estudio liderado por un equipo de geofísicos de la ETH Zürich arroja nuevas luces sobre las posibles causas de estas variaciones, sugiriendo que los procesos en el núcleo externo de la Tierra podrían ser los responsables de algunas de las fluctuaciones observadas.
Fluctuaciones en la rotación de la Tierra
El día terrestre no siempre dura exactamente 86,400 segundos. De hecho, varios factores contribuyen a pequeñas alteraciones en la duración del día.
La fricción provocada por las mareas lunares, por ejemplo, hace que la rotación de la Tierra se desacelere de manera gradual, alargando el día a razón de 1,72 milisegundos por siglo.
El rebote glacial, el ajuste de la corteza terrestre tras el derretimiento de las capas de hielo de la última glaciación, también influye en la duración de los días.
Sin embargo, existen fluctuaciones mucho más difíciles de explicar que ocurren a lo largo de milenios, de entre 3 y 4 milisegundos cada mil años. Estas variaciones a largo plazo han sido el foco de un nuevo estudio publicado en Geophysical Research Letters, que busca comprender mejor los procesos subyacentes a este fenómeno.
Investigación de la ETH Zürich
El equipo de la ETH Zürich utilizó herramientas avanzadas para analizar las fluctuaciones milenarias en la duración del día. El estudio empleó registros históricos de eclipses, que datan desde el 720 a.C., y datos geomagnéticos tanto antiguos, extraídos de rocas, como modernos, obtenidos mediante satélites.
Además, implementaron redes neuronales Bayesianas para simular cómo los flujos de hierro líquido en el núcleo externo de la Tierra podrían afectar la rotación del planeta.
Los resultados sugieren que las fluctuaciones en el núcleo externo de la Tierra son consistentes con las variaciones observadas en la duración del día, aunque el modelo utilizado aún está simplificado, lo que deja espacio para futuras mejoras.
Implicaciones y desafíos
Este estudio refuerza la idea de que los procesos en el núcleo terrestre, como la magnetohidrodinámica, tienen un impacto significativo en la rotación de la Tierra.
Aunque el modelo utilizado por los investigadores no incluye todos los factores posibles, el trabajo representa un avance importante en la comprensión de las fluctuaciones milenarias en la duración del día. Sin embargo, la comunidad científica sigue evaluando las implicaciones y limitaciones de estos hallazgos.
A futuro, los científicos esperan mejorar estos modelos mediante el uso de datos más precisos y la inclusión de otros factores dinámicos, lo que podría revolucionar nuestra comprensión de la Tierra y su rotación.
(Con información de Muy Interesante)