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España.- A 466 años luz de distancia de la Tierra se encuentra un Júpiter caliente y más intenso que el color carbón; uno de los mundos más oscuros que se conocen. Este planeta gaseoso y gigante, orbita alrededor de su estrella una vez cada 1.75 días. Al estar tan cerca de su sol, la intensa radiación emitida ha fulminado por completo toda su atmósfera y nubes, creando una superficie ardiente (más de 1,200 ºC) y llena de bruma que envuelve este oscuro planeta.

Se trata de un planeta bastante extraño. Este tipo de astros, son gigantes gaseosos con masas similares a la de Júpiter, pero están extremadamente cerca de sus estrellas, generalmente en órbita en un período de menos de 10 días. Debido a esta proximidad, también son extremadamente calientes,según el portal Muy Interesante.

La mayoría de ellos refleja aproximadamente el 40% de la luz estelar que les llega. Sin embargo, unos pocos, como WASP-12b descubierto el año pasado, van más allá. Este último absorbía al menos el 94% de la luz. Sin embargo, el recién descubierto WASP-104b es aún más oscuro. Según investigadores de la Universidad de Keele (Reino Unido), absorbe del 97 al 99% de la luz.

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La razón de esta oscuridad probablemente tiene que ver con la proximidad del planeta a su estrella, una enana amarilla a unos 466 años luz de nosotros, en la constelación de Leo.

Al igual que la mayoría de los Júpiter calientes, WASP-104b está bloqueado por las mareas, lo que significa que un lado del mundo siempre se enfrenta a su estrella anfitriona. Esto implica que el planeta tiene un lado diurno permanente y está tan cerca de la estrella, a una distancia de alrededor de 4.3 millones de kilómetros que apenas tarda 1,75 días en completar una órbita.

Aunque son más oscuros de lo normal, los Júpiter calientes no son más difíciles de detectar que los planetas normales. Para detectarlos, se observa un oscurecimiento regular y periódico de los niveles de luz normales de la estrella anfitriona a medida que el planeta se mueve delante de ellos. Esto se llama método de tránsito, y así es como trabaja Kepler, el cazador de planetas de la NASA. Un método que resulta bastante efectivo.

El Júpiter caliente más oscuro que conocemos hasta la fecha es un planeta llamado TrES-2b, que refleja apenas el 0,1% de la luz que lo golpea.