Los beneficios que la leche de yegua puede ofrecerte
Este lácteo tiene aspectos químicos que la hacen de las más parecidas a la humana.
|
Agencia
De acuerdo con el portal web Salud Y Terapia, la leche de yegua tiene propiedades y características que la hacen especialmente beneficiosa para la salud. Algunos aspectos que distinguen este lácteo son:
- En composición química y particularmente en el contenido proteico, es de las más parecidas a la leche humana. (Businco et al. 2000)
- Los équidos prácticamente no se han medicado, es decir, no están atiborrados de antibióticos o productos químicos como los demás animales criados para el consumo humano. Por tanto la microbiota intestinal no se encuentra tan alterada.
- En comparación con la leche humana y la de vaca es la que menos grasa tiene. En cuanto a proteínas se encuentra entre la leche humana y la de vaca (la que más tiene). El contenido de lactosa es parecido al de la leche humana y por tanto superior a la de vaca pero cabe destacar que al contener bacterias y otras sustancias que ayudan al organismo a generar lactasa, es más digerible para los intolerantes a la lactosa, pudiendo tolerar su consumo y beneficiarse de sus propiedades. Caloricamente es la menos energética ya que proviene básicamente de la lactosa (azúcar) y no de las grasas.
También te puede interesar: ¿Tomar aloe vera es un efectivo método anticonceptivo?
¿En que nos ayuda?
- Por su aporte en aminoácidos esenciales como el triptófano, la tirosina y la cisteína, la leche de yegua induce a la síntesis de serotonina favoreciendo el buen funcionamiento nervioso: estado de ánimo, hambre, sueño, etc...
- La energía que aporta al provenir de la lactosa, es una energía inmediata rápidamente metabolizable debido a la gran cantidad de aminoácidos esenciales, vitaminas, minerales, ácidos grasos poliinsaturados (omega 3 y 6) y la microbiota intestinal.
- Es muy rica también en enzimas naturales que ayudan a regular la microbiota intestinal limitando el crecimiento de bacterias patógenas y favoreciendo las deseables. Nuestra flora intestinal es nuestra pirámide en la salud porque a través de ella absorbemos las vitaminas y los nutrientes, se genera serotonina y dopamina entre otros y por tanto deberíamos cuidarla mucho más de lo que hacemos habitualmente. Nuestro intestino en nuestro segundo cerebro.
La leche de yegua posee:
- Lactoferrina: una proteína con gran capacidad antimicrobiana además de ser transportadora del hierro al torrente sanguíneo.
- Beta-lactoglobulina: no existe en la leche humana, tiene propiedades antimicrobianas y antivirales capaz de inhibir patógenos a nivel gastrointestinal y de promover la respuesta inmunitaria del organismo.
- Alfa-lactoalbúmina: esta proteína ayuda a la absorción de los minerales sobretodo del calcio, es bactericida y ayuda a digerir la lactosa.
- Inmunoglobulinas: IgG, IgA e IgM. Con lo cual nos ayuda a reforzar nuestro sistema inmunitario.
- Albúmina sérica: proteína encargada de transportar sustancias como ácidos grasos, aminoácidos, esteroides, minerales como el calcio entre otros.
- Lisozima: enzima que nos ayuda a digerir la caseína, libera azúcares a nuestros intestinos para facilitar el crecimiento de algunas bacterias esenciales en nuestra microbiota. Es una enzima bactericida y tiene propiedades antibióticas. En algunos estudios se ha visto que tiene un importante papel en la regulación del cáncer frenando la replicación del ADN a través del envío de una señal al gen tp53 (gene que se encarga de enviar una señal a la célula tumoral para que se suicide). El déficit de lisozima puede originar tumores tanto malignos como benignos.