El color de la piel del pollo no significa que sea saludable
Si es blanco o amarillo poco tiene que ver con sus características nutricionales.
Agencia
CIUDAD DE MÉXICO.- Cuando compramos un pollo en el mercado, solemos fijarnos en su color. Si su carne es más rosada y su grasa más blanquecina, pensamos que el animal ha sido criado en una de esas granjas en las que todos los ejemplares viven hacinados, ha sido alimentado con un mal pienso y ni siquiera ven la luz del sol.
De acuerdo con información de El País y Cuatro.com, también es común que cuando el color en la carne del producto tiende más hacia el naranja y su grasa es más amarilla, se cree que el animal ha tenido una vida más "plena y feliz", en la que ha podido disfrutar del campo, buena comida y libertad, lo que popularmente llamamos "de corral" (aunque esta denominación incluye en realidad a todas las aves criadas o no en libertad).
En definitiva, que ha sido criado de una forma más ecológica, sostenible y, por lo tanto, saludable (y eso, a pesar de que lo ecológico no es necesariamente más saludable). Lamentamos informarle de que el color no es un indicativo de que el animal haya vivido más feliz.
¿Qué pollo de los que comemos ha sido alimentado de forma natural? ¿Es más sano el de color amarillo?
Es igual, ni es más sano ni es alimentado de forma más natural. Lo único que lo diferencia es el uso de un colorante. Pero la mayoría asociamos el color amarillo al pollo mejor alimentado. Además, la industria alimentaria suele vender los pollos de color amarillo con la denominación de ‘pollo de corral’, ‘pollo campero’ o ‘pollo de campo’.
Los aditivos no solo influyen en el color del pollo, tiene otras consecuencias. El color de los huevos también está determinado por el colorante artificial. A diferencia del pollo, el huevo con color naranja cuesta lo mismo del hubo con color amarillo.
“El color amarillo del pollo es producido, única y exclusivamente por la alimentación. No se trata de una cuestión de raza. Los que comen maíz son amarillos y los que comen trigo son de piel más blanquecina”, cuenta el presidente de la Federación Avícola Catalana, Joan Antón Rafecas.
“El betacaroteno que tiene el maíz es lo que le da ese color amarillo al pollo”, explica Juana María González, dietista nutricionista y tecnóloga de los alimentos de Alimmenta.