¿Una gripe persistente? Conoce el virus Sincitial Respiratorio, que afecta a niños
Aunque sus síntomas pueden parecerse a los de la gripe común o COVID-19, el VRS está cobrando relevancia por su alta prevalencia.
En las últimas semanas, muchas personas han compartido preocupaciones en redes sociales sobre una gripe persistente que no desaparece, especialmente entre los niños.
Esta enfermedad se ha asociado al virus sincitial respiratorio (VRS), una infección viral que, aunque común, está afectando a un número creciente de personas.
Aunque sus síntomas pueden parecerse a los de la gripe común o COVID-19, el VRS está cobrando relevancia por su alta prevalencia, especialmente en niños pequeños y adultos mayores.
El VRS es una causa frecuente de infecciones respiratorias en infantes, pero también puede afectar a personas de edad avanzada y aquellos con sistemas inmunológicos comprometidos.
En la mayoría de los casos, el virus provoca síntomas leves similares a un resfriado, pero en ciertos casos, puede causar complicaciones graves como bronquiolitis y neumonía.
Síntomas, diagnóstico y prevención del Virus Sincitial Respiratorio
Entre los síntomas más comunes del VRS se incluyen congestión nasal, estornudos, fiebre baja, tos, y dificultad para respirar. En los bebés, los síntomas pueden incluir pérdida de apetito, deshidratación, y respiración acelerada.
El VRS se propaga rápidamente a través de las gotas respiratorias y el contacto con superficies contaminadas, lo que lo convierte en un virus de fácil transmisión, especialmente en lugares cerrados como hogares, escuelas y hospitales.
El diagnóstico del VRS se realiza mediante pruebas específicas, aunque los médicos también suelen basarse en los síntomas y el historial médico del paciente.
Actualmente, no existe un tratamiento específico, por lo que las intervenciones se enfocan en el manejo de los síntomas y la prevención de complicaciones. En casos graves, los niños pequeños pueden requerir hospitalización y oxígeno.
Para prevenir la propagación del VRS, se recomienda lavar frecuentemente las manos, evitar el contacto cercano con personas enfermas, y desinfectar superficies de uso común.
(Con información de