¿Sabías que los pasteles y la cochinita pibil te pueden dejar ciego?

El sobrepeso es causante de numerosas enfermedades, entre ellas las de la visión; la hipertensión afecta los vasos sanguíneos que irrigan los ojos.

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La obesidad se considera un fuerte antecedente de la diabetes, una enfermedad que puede ocasionar daños en el globo ocular y la retina. Imagen de contexto de una persona con sobrepeso. (Archivo/SIPSE)
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Cecilia Ricárdez/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yucatán.-  Los pasteles y las tortas de cochinita te pueden dejar ciego. Esta afirmación, que parece descabellada, no lo es, ya que expertos afirman que el consumo habitual y crónico de este tipo de alimentos causa obesidad, una enfermedad que a su vez provoca diabetes tipo II y juntas son un imán para otras complicaciones como problemas de la vista.

Entre las enfermedades que provoca están: cataratas, visión borrosa, deformación del cristalino o el lente intraocular, sólo por mencionar algunas, que en casos graves conducen a la pérdida total del sentido de la vista.

Por eso decimos que esos pasteles que te comes hoy te pueden limitar y hasta quitar la visión mañana. 

Para dimensionar este problema, con amplia presencia en la sociedad yucateca, acudimos con Adda Villanueva, retinóloga, titular del Centro Mejora Visión MD. 

¿Por qué la obesidad afecta mi vista?

Una de las causas: los malos hábitos al comer, ya que se prefieren alimentos de baja calidad de los nutrientes y que sumado a la obesidad, provocan bajos niveles de luteína y zeaxantina, sustancias provenientes de frutas, verduras, yema de huevo y que en altos niveles en la sangre, tienen la función de proteger la retina.

La obesidad se considera un fuerte antecedente de la diabetes, una enfermedad que puede ocasionar diaños en el globo ocular y la retina.

De la misma forma, otras enfermedades ocasionadas por la obesidad, como la diabetes o la hipertensión, pueden ocasionar problemas de visión, por el deterioro de los vasos sanguíneos que irrigan el ojo.

Cuando estos vasos se debilitan dejan salir sangre que lesiona la retina y la información que se manda al cerebro sobre la imagen llega borrosa.

La obesidad también provoca hipertensión arterial y arterioesclerosis (alteración vascular que se caracteriza por el endurecimiento, el aumento del grosor y la pérdida de elasticidad de las paredes arteriales).

Ojo con los ojos de los niños

Como los niños están en pleno desarrollo de sus ojos, con la obesidad pueden presentar deformaciones en el cristalino y la córnea. Esto incluso por el peso de los párpados al tener mucha grasa facial y esto impide el correcto desarrollo de la vista.

Al tener problemas de agudeza visual en estas condiciones, el niño es afectado en su desempeño escolar y los padres lo confunden con falta  de atención a las clases, cuando la raíz del problema es de la vista.

*Independientemente del tema de la obesidad, los niños deben tener revisiones oftalmológicas antes de cumplir el año para detectar tumores y luego cada cinco años para inspecciones rutinarias de prevención. Este punto es importante porque los niños no se dan cuenta y un indicador son los problemas en la escuela para hacer sus tareas porque no alcanza a ver el pizarrón. 

Panorama y factores de riesgo

  • Predisposición a la diabetes por sobrepeso y malos hábitos (comer más calorías que las que se requieren y no se pueden quemar).
  • No incluir en las jornadas diarias actividad física.
  • El Observatorio Mexicano de Enfermedades no Transmisibles indica que el 63 por ciento, es decir seis de cada 10 habitantes de Yucatán, tiene sobrepeso u obesidad (30 por ciento y 33 por ciento). 
  • De acuerdo con datos de la delegación estatal del IMSS existen más de 300 mil personas diagnosticadas con diabetes y un número igual la padece y no lo sabe.
  • Yucatán está en los primeros lugares en obesidad, tanto en adultos como niños, y en diabetes.
  • Si uno de sus padres es obeso, el hijo tiene el 40 por ciento de probabilidades de serlo y si ambos padres tienen esta condición aumenta el doble la posibilidad de que el niño padezca la enfermedad.
El dato 

Si estamos mal ¿qué hacemos?

  • Consultar un especialista en ojos: oftalmólogos o retinólogos.
  • En el caso de los adultos, asistir a una revisión de la vista una vez al año.
  • En los niños, en especial aquellos que presentan sobre peso u obesidad, acudir al especialista en los primeros cinco años de edad y luego cada cinco para corregir los problemas de visión.
  • Asesorarse con expertos para adquirir hábitos saludables en cuanto a alimentos y ejercicio.
  • Llevar adecuadamente el control de la diabetes con revisiones periódicas de los ojos.
  • En algunos casos el problema de la vista se corrige con tratamiento y en otras con cirugía, pero de acuerdo con el caso, la recuperación varía. En casos severos es poco probable y algunos pierden la visión.

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