Dos posibles pedófilos corruptores de menores seguirán en las calles haciendo de las suyas con total impunidad, expresó Pedro Oscar Joaquín Delbouis al conocer que dos extranjeros acusados de este delito quedaron en libertad.

Con un escueto comunicado, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo (FGE) anunció que un juez de control calificó de ilegal la detención de dos hombres acusados de corrupción de menores en Cozumel.

Los familiares de dos de las cuatro víctimas que fueron rescatadas tras ser retenidas por la fuerza en un departamento de la colonia Centro, aparentemente con fines sexuales, repudiaron la decisión del juez pues la dan la oportunidad a los señalados de escapar de la acción de la justicia.

Como se dio a conocer de manera oportuna en este medio de comunicación, dos adolescentes de 13 y 15 años de edad desaparecieron la semana pasada por lo que sus padres, Raúl y Verónica, se dieron a la tarea de ubicarlos.

“Vaya usted con los policías e indíqueles el lugar”, le ordenó un elemento de la Policía de Investigación (PDI) de la FGE, cuando eran las 11:30 de la mañana del 30 de septiembre y se presentaron ante la Décima Agencia del Ministerio Público del Fuero Común (AMPFC), cuando ya casi se cumplían las 36 horas de la desaparición.

Sus hijos y otros dos adolescentes habían permanecido retenidos por la fuerza en un departamento de la avenida 25 entre calles 10 y 12.

Junto con ellos también estaban Reinaldo y Christian, los presuntos responsables de su retención, quienes fueron detenidos y presentados ante la AMPFC.

Luego de varios días en los que se les ingresó al penal de la isla, acusados de Perversión de Menores, la noche del 3 de agosto la FGE dio a conocer que su detención fue ilegal, mediante un comunicado que no da mayores detalles pero que responsabilizó a un juez de control, quien consideró que la aprehensión de los sospechosos fue ilegal.

Sin embargo, cita el comunicado, la FGE continuará con las indagatorias para judicializar la carpeta de investigación sin detenido, a fin de procurar justicia a los adolescentes inmiscuidos en este probable hecho constitutivo de un ilícito.

Esa misma noche Raúl, padre de los dos niños retenidos por los acusados y quien estuvo presente en la audiencia, aseguró que el juzgador reprendió al agente del ministerio público por un trabajo desaseado y poco sustentado.

Agregó que en sus conclusiones el magistrado justificó la presencia de los adolescentes en el departamento como una situación de pernocta y que el que hayan consumido alcohol alentados por dos adultos, no era ilegal.

“Desde que se les estaba tomando su declaración en la fiscalía mis hijos fueron amedrentado y se les obligó a firmar una declaración llena de omisiones e inconsistencia. Me siento decepcionado pues pensé que estos hombres recibirían su castigo”, se lamentó el padre de familia.