Sin motivo aparente, bandidos han comenzado a retirar los señalamientos con los que se marcan los nidos de tortugas marinas que llegan en la zona oriental de Cozumel, situación que entorpece su registro.

El Subdirector de Ecología y responsable del campamento tortuguero San Martín, Mauricio Martín Mendoza, dio a conocer que el personal de esta dependencia al realizar los recorridos de vigilancia hallaron varias estacas que fueron retiradas de los puntos que señalaban el sitio de anidación.

Aunque las entradas a la zona oriental deben permanecer cerradas al público, la falta de vigilancia por parte de la Policía Municipal favorece la entrada de cualquier persona. Fuentes al interior de esta corporación manifestaron que aunque hay más de 50 patrullas, siguen haciendo falta muchos policías.

Un recorrido realizado por Novedades de Quintana en la carretera costera sur reveló que la única "vigilancia" en ese punto de acceso a la zona oriental, son varios objetos de plástico muy dañados que hacen las veces de reten. Trabajadores hoteleros y taxistas en la zona afirmaron que durante las noches la situación es la misma y solo se bloquea un carril, pero sin presencia policiaca.

Ante la falta de vigilancia en las entradas por carretera a la zona de anidación, el personal de la dirección de Ecología no le queda otra opción más que apelar a la buena fe de las personas que trasgreden la restricción para circular por la zona oriental a la que solo se tiene acceso por la carretera transversal y la costera sur.

Mauricio Martín hizo público que durante un recorrido la semana pasado por la zona de "Punta Morena" se detectaron varias estacas en la que se anotan los registros de anidación, apiladas sobre la playa. En esas señales, recalcó, se registran datos de los nidos como la fecha del desove, especie, número de nido y permite identificar en donde se encuentran para que no sean dañados.

El funcionario recalcó que las tablillas de aproximadamente un metro de longitud, advierten a los bañistas del sitio donde se encuentra y eviten dañarlos. Pidió que los visitantes a los arenales eviten llevar a sus mascotas para que estas no dañen los nidos de los quelonios que son una especie en peligro de extinción. Añadió que si alguna persona es sorprendida dañando a los niños, huevos o crías de tortugas puede pasar varios años en prisión