Agencias
Dando una gran muestra de profesionalismo, un réferi de la WWE logró concluir una lucha a pesar de encontrarse en la lona con una pierna rota debido a una secuencia fallida durante la pelea.

El incidente ocurrió durante el evento de NXT en Nebraska, cuando Tom Castor vigilaba el enfrentamiento entre Velveteen Dream y Tyler Breeze. Tras el incidente, el árbitro realizó una señal para indicar que se encontraba lesionado, por lo que un reemplazo subió al cuadrilátero.

Desafortunadamente, Raúl Mendoza, quien tomaría el control de la pelea, se lesionó a la vez momentos más tarde, por lo que, al momento de terminar la pelea, Castor tuvo que posponer la revisión médica y girarse para poder realizar el conteo de tres.

Drak Wuertz, otro réferi de la empresa, señaló que al término de la pelea y mientras era trasladado en una camilla, el réferi le apretó la mano y le dijo emocionado: “Drake, amo este negocio“.

A pesar de haber sido contratado en 2017, Castor se ha vuelto uno de los árbitros más importantes de la marca de desarrollo de la WWE, además de haber tenido la oportunidad de trabajar en varias fechas de SmackDown Live.

(Con información de lopezdoriga, The Sun y Wrestling Inc)