CIARÁN FAHEY

Francia y Alemania suelen toparse en las fases decisivas de los grandes torneos.

Este Campeonato Europeo es la excepción.

Los equipos chocarán en la etapa de grupos de una Euro o la Copa del Mundo por primera vez el martes al estrenarse en Múnich.

Su última cita en un torneo de envergadura se dio en las semifinales de la Euro 2016. Un doblete de Antoine Griezmann le dio a Francia la victoria 2-0 ante Alemania, los entonces campeones mundiales, en Marsella.

Alemania nunca se recuperó de ese mazazo. Aunque los franceses perdieron ante Portugal en la final europea hace cinco años, Les Bleus acabaron alzando la Copa del Mundo en Rusia, dos años después.

Aunque parezca mentira, ningún integrante del actual plantel de Alemania ha facturado un gol en una Euro. Thomas Müller, con 11 torneos internacionales a cuestas, marró un penal en el cruce de cuartos de final contra Italia en el certamen de 2016.

Alemania confía en un despertar de su selección. Debutar con el pie derecho en Múnich podría marcar el rumbo en el que será el último torneo de Joachim Löw como entrenador de la Mannschaft tras 15 años al mando.

No hay margen de error en el grupo más fuerte del torneo.

Alemania se las verá con el reinante campeón europeo Portugal el 19 de junio, cuatro días después de cerrar el Grupo F ante Hungría. Los alemanes disputarán sus tres partidos en Múnich, donde el 2 de julio se escenificará uno de los cruces de cuartos de final.

Francia enfrentará a Hungría, también el 19 de junio, en Budapest, y se permanecerá en la ciudad para medirse contra Portugal el 23 de junio.

"El ánimo del equipo está muy bien. Hay mucha ambición para este Campeonato Europeo y eso me hace sentir confiado y me permite dormir tranquilo", dijo Löw, quien decidió renunciar tras el torneo y dar paso a otro para que se encargue de continuar la renovación que puso en marcha tras la eliminación en la primera ronda del Mundial de 2018. 

Hansi Flick, su auxiliar en la conquista del Mundial de Brasil 2014, tomará las riendas con miras a lograr la clasificación al campeonato del mundo que se jugará el año que viene en Qatar.

En busca de experiencia, Löw apeló otra vez a Müller y Mats Hummels para esta Euro y la decisión parece haber surtido efecto. Alemania dejó una buena imagen al empatar 1-1 contra Dinamarca y luego goleó 7-1 a Letonia, con goles aportados por siete jugadores distintos.

Ese gol encajado en un fogueo quizás resulte ser más importante.

"Fue un llamado de atención sobre esos momentos en que uno no está concentrado, que no está alerta", dijo Löw. "Nuestros oponentes aprovecharán el primer error. Debemos estar bien concentrados en cada situación durante 90 minutos". 

El temido tridente ofensivo francés conformado por Griezmann, Kylian Mbappé y Karim Benzema — éste último convocado por el técnico Didier Deschamps tras una auencia de casi seis años — no perdonaría el mínimo despiste alemán en su retaguardia.

Benzema se ha recuperado de un fuerte golpe sufrido en la victoria 3-0 en el amistoso contra Bulgaria el 8 de junio. El delantero de 33 años había reaparecido con el seleccionado cuatro días antes, fallando un penal y estrellando un remate en el poste en la victoria 3-0 ante Gales.

Francia aspira a convertirse en el primer seleccionado que reina como campeón europeo y mundial dos veces al mismo tiempo. Como jugador, Deschamps ganó el Mundial de 1998 y luego la Euro 2000, y ahora podría hacerlo como técnico.

Aparte de Francia, Alemania Occidental y España han sido los únicos en ostentar los dos títulos al mismo tiempo.