Clásicos futboleros 'prenden' focos rojos en Argentina

Cerca de nueve mil elementos estarán presentes en distintos encuentros, de los cuales destaca el 'River vs Boca por su alto grado de peligro.

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El pasado 14 de mayo, aficionados del Boca Juniors agredieron con un gas a los jugadores del River Plate en La Bombonera. Este fin de semana se disputa una jornada que pone en alerta a las fuerzas de argentinas por el alto grado de violencia que suele registrarse en los encuentros a realizarse. (Archivo EFE)
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Agencias
BUENOS AIRES, Argentina.- Más de nueve mil policías, cifra récord para una fecha de la liga de futbol argentino, se desplegarán dentro y fuera de las canchas para un capítulo que además del River-Boca, el choque más cautivante de todos, será escrito por otros clásicos como el de Independiente-Racing, Huracán-San Lorenzo, Rosario Central-Newell's Old Boys, Estudiantes-Gimnasia y Colon-Unión. Por cuestiones de vecindad, todos estos contrincantes son viscerales enemigos casi desde la cuna.

Por lo tanto, la 24ta fecha estará rodeada de extrema tensión por estos clásicos que son un torneo aparte: el triunfo se toma con euforia extrema y la derrota con tristeza infinita.

En un certamen de 30 equipos habrá fútbol en 15 estadios y el mayor número de policías, unos mil 300, se concentrará en el Monumental de River, seguido por unos mil que estarán en Rosario para el encuentro Central-Newell's. Estos datos surgen de los clubes y de otros voceros oficiales, pero a veces son aproximados ya que no hay información global de la policía o de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA).

La fecha atraerá una cantidad de policías que jamás se ha visto en la historia del fútbol argentino, tal como lo afirma este viernes, el circular deportivo Olé.

Duelo de 'violencia extrema'

El superclásico se jugará por primera vez después del vergonzozo 14 de mayo en La Bombonera, cuando fanáticos de Boca arrojaron un gas irritante que afectó la vista de jugadores de River en partido de Copa Libertadores que fue suspendido por el árbitro Darío Herrera, el mismo que volverá a dirigirlos.

"Ojalá que de ambos lados hayamos aprendido que esos momentos no se pueden volver a repetir. Fue muy feo", declaró el miércoles el centrocampista de River Leonardo Ponzio. "Debemos tratar de que sea una semana sin violencia", agregó el campeón con River de la Libertadores de 2015.

Rosario también está en vilo por el duelo del domingo entre el local Central ante Newell's, cuyo delantero Maxi Rodriguez aún está consternado porque desconocidos balearon este martes la casa de su abuela Beatriz, sin víctimas. En el clásico anterior en julio, el frente del mismo domicilio amaneció con frases pintadas, la más fuerte de ellas "Clásico o balas".

Advertidos

El duelo del domingo en Santa Fe entre el anfitrión Colón y Unión, es otro de los choques que están bajo la lupa de la policía provincial que destinó a unos 900 de sus efectivos.

"Jugadores, jugadores, si el domingo no ganamos, flor de quilombo (pelea) se va a armar", fue unos los cantos hostiles con que los fanáticos de Colón despidieron a su propio equipo el pasado fin de semana, tras la derrota como local 1-0 ante Sarmiento.

Al margen que se dispute la "fecha de los clásicos", el fútbol argentino cada vez requiere mayor vigilancia, algo llamativo si se tiene en cuenta que desde 2013 la presencia de público visitante está prohibida por cuestiones de seguridad. Pero aun así, la violencia es moneda corriente con peleas entre fanáticos de bandos disidentes o con agresiones a árbitros y jugadores.

No dan tregua

El último escándalo de magnitud ocurrió el 30 de agosto en Mendoza cuando el choque entre el local Godoy Cruz y el campeón Racing, que ganaba 1-0, fue suspendido a los 25 minutos por una lluvia de proyectiles sobre los jugadores y árbitros que debieron refugiarse en el centro de la cancha. Hinchas violentos de Godoy generaron los incidentes y la AFA decidió que el partido se complete en cancha neutral y a puertas cerradas, sin fecha aún.

Al despuntar el año, el candidato a presidente por el gobernante Frente para la Victoria, Daniel Scioli, anunció que después de la Copa América volvería al público visitante a las canchas de la provincia de Buenos Aires, la más grande del país y que él gobierna. Allí conviven Independiente y Racing, acérrimos rivales de Avellaneda, dos de los equipos más populares de Argentina y que el sábado chocarán en la cancha del primero.

Más de dos meses después de la copa de Chile todo sigue igual, aunque con más gente en las canchas: a los hinchas habituales se le suma una multitud adicional de policías, al menos para este fin de semana.

(Información de Associated Press)

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