Russell Gutiérrez Vales/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Tres orejas a Joselito Adame, Pablo Hermoso las pierde por pinchar y Fermín Spínola, voluntad, en un terciado encierro, ayer en la quinta corrida de la temporada en la Plaza de Mérida.

Con lleno en los tendidos, tarde con mucho sol y algo de viento, se lidiaron 2 toros de Bernaldo de Quiroz y 4 de Campo Hermoso, todos justos de presencia, cornicortos y rajados al final de la lidia.

Joselito, diestro de Aguascalientes, lidió a “Agradecido”, negro bragado cornicorto, justo de presencia como sus hermanos, con la capa 2 verónicas por el lado izquierdo, una media y la revolera.

Quita por chicuelinas combinadas con “lopezcinas”, rematadas con bonito recorte rodilla en tierra, ovación y dianas; toma los palos y regala 3 bonitos pares al cuarteo, dejándose llegar al toro que se arranca alegre desde largo, ovación cerrada del público puesto de pie, inicia su faena rodilla en tierra rematado con forzado de pecho, gritos de torero, torea por ambos lados, sacándole buenos muletazos sin poder ligarlos, el toro se vuelve tardo y comienza a regatear las embestidas, manoletinas y bonito ayudado por abajo. Termina de estoconazo en lo alto que hace vibrar los tendidos, la autoridad concede 2 orejas bien ganadas, que son paseadas al grito de “¡torero!...¡torero!...”

Con el sexto, de nombre “Servicial”, un negro veleto, comienza con una larga de rodillas, quita por chicuelinas antiguas y reboleras. Toma los palos a petición del respetable e invita a Spínola cubren con acierto el segundo tercio, dianas y ovación. Inicia en tablas con ayudados por abajo y muletazos por alto, el toro es tardo y regatea las embestidas, algunos derechazos y 2 naturales que le son coreados con fuerza, se nota y se hace presente que el público es más fiestero que aficionado.

El toro concluye rajado y buscando la querencia, pinchazo y entera terminan con “Servicial”. El público pide y exige la oreja, que al final la autoridad, luego de una sonora rechifla, termina concediendo.

Pablo Hermoso abre plaza enfrentando a “Amistoso”, un negro bragado paliabierto, justo de presencia, que se duele al primer y único rejón de castigo, la torería del navarro y su conocimiento de la lidia, le hacen hacerse de las embestidas a base de aguantar y dejando que el toro se acerque a los estribos, evitando que el burel busque la querencia.

Una banderilla al quiebro dejándose llegar al toro y llevándolo templado en una magistral vuelta al ruedo, saliendo y rematando la suerte en tablas. El boleto está pagado. Luego, otras banderillas, los quiebros que son del gusto popular, cortas en buen sitio, la rosa, el público está con el torero, es una pena que lo haya pinchado antes de meter el rejón de muerte, grande y sonora ovación, el público pide la oreja, pero a gritos y hay que hacerlo mostrando los pañuelos y no a gritos. Le faltó a don Ulises un poco más de criterio, pues oreja la merecía.

Con su segundo, de nombre “Comprometido”, un toro más complicado que su primero, sin embargo, el navarro es una garantía de entrega y dio su mejor esfuerzo por complacer a la afición. Desafortunadamente se eternizó con el rejón de muerte y terminó con división de opiniones y luego de un aviso.

Fermín Spínola sorteó lo más complicado al enfrentar a “Honorable” y a “Generoso”, siempre poniendo su mejor esfuerzo y cubriendo con acierto el segundo tercio en su segundo y con Joselito en la lidia del sexto. Otra vez será.

Buenos puyazos a los toros tercero, quinto y sexto. Mauro Prado salió al tercio.