El Real Madrid tuvo un debut amargo en la liga española al empatar 1-1 en su visita al Mallorca, en un partido que marcó la esperada presentación de Kylian Mbappé.

Aunque los merengues iniciaron con un gol temprano, las expectativas se desinflaron a medida que avanzó el encuentro. Rodrygo Goes fue el encargado de abrir el marcador a los 13 minutos, después de un elegante taconazo de Vinicius Júnior dentro del área. El brasileño colocó el esférico con precisión en el fondo de la red, desatando la euforia entre los seguidores del equipo blanco.

Sin embargo, la alegría fue efímera. A los 53 minutos, Vedat Muriqi niveló el marcador con un potente remate de cabeza tras un tiro de esquina. Antonio Rüdiger, en su intento de despejar el balón, no logró evitar el gol, lo que dejó al Madrid en una situación comprometida. Muriqi, visiblemente agotado, celebró el empate como una victoria, reconociendo la importancia de sumar puntos frente a un equipo de la talla del Madrid.

"Era muy importante empezar puntuando contra un equipo como el Madrid, que es el mejor del mundo",

comentó el delantero del Mallorca tras el partido.

El Mallorca, dirigido por Jagoba Arrasate, tuvo oportunidades claras para llevarse los tres puntos en los minutos finales, pero la puntería no estuvo de su lado. Los remates se desviaron, y el equipo bermellón se tuvo que conformar con el empate. El Madrid, por su parte, terminó el partido con diez jugadores después de que Ferland Mendy fuera expulsado por una entrada sobre Muriqi en la última jugada del encuentro.

El técnico del Real Madrid, Carlo Ancelotti, no ocultó su frustración tras el partido. A pesar de haber dominado en varios tramos del encuentro, el equipo no logró capitalizar las oportunidades.

"El año pasado estuve contento con algunos empates, ahora no lo estoy porque creo que se podía hacer mucho mejor",

expresó Ancelotti, subrayando la necesidad de mejorar en actitud y ejecución para futuros partidos.

La presentación de Mbappé, la flamante contratación del Madrid, estuvo lejos de ser la esperada. Aunque el delantero francés mostró destellos de su calidad, no pudo marcar la diferencia en un partido que requería más de su talento.

El ataque merengue, que también contó con Vinicius Júnior, generó pocas opciones de gol tras el tanto inicial, dejando dudas sobre su capacidad para imponerse en la liga española.

Este resultado marca un inicio incierto para el Real Madrid en su intento por romper una sequía de títulos consecutivos en la liga española, una hazaña que no ha logrado desde las temporadas 2006-2007 y 2007-2008. Además, Ancelotti busca poner fin a la racha sin que un técnico del club sea bicampeón, algo que no se ha visto desde que Leo Beenhakker lo consiguió en los torneos de 1987-1988 y 1988-1989.

(Con información de The Associated Press)