Ángel Villegas/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Aprieta los dientes con gran fuerza, con tantísima presión, que en cualquier momento las piezas puedan saltarle por los aires mientras celebra sus deslumbrantes victorias. Esa imagen le ha dado la vuelta al mundo, como el acontecimiento que encabezará en Quintana Roo: la inauguración oficial de su primera academia fuera de España. ¡Bienvenido, Rafa!

Referente del deporte

Nadal nació en Manacor (Mallorca, España) el 3 de junio de 1986. Desde pequeño mostró interés por el tenis, pero también por el fútbol.

Como era de esperarse, tuvo que elegir entre ambas disciplinas, hasta que finalmente prefirió el ‘deporte blanco’.

En 2004, Rafa conquistó junto con sus compañeros de la Selección Española a ensaladera de la Copa Davis, su primer gran título.

Posteriormente, se consagró como profesional imponiéndose en la Final de Roland Garros a Mariano Puerta, ganando el primero de los once títulos del torneo parisino.

Su palmarés es impresionante, con un total de 17 torneos de Grand Slam, dos medallas de oro olímpicas y cuatro Copas Davis para su país.

En 2016, puso en marcha en su ciudad natal la Rafa Nadal Academy con el objetivo de transmitir su experiencia a jóvenes.

Ahora, los proyectos en los que ha puesto sus grandes ilusiones son, sin duda, la Fundación Rafa Nadal (dedicada a integración de niños y jóvenes a través del deporte en España y la India) y la Academia Rafa Nadal, que ya tiene sedes en Mallorca y México.

A diez años de la proeza

Hace una década, el primero de febrero de 2009, el deporte español vivió uno de sus capítulos más importantes de su historia: Rafa Nadal se convirtió en el primer y único tenista nacional en conquistar el Abierto de Australia.

Las épicas y agotadoras batallas ante Fernando Verdasco y Roger Federer, en la Semifinal y Final, respectivamente, quedaron escritas con letras de oro.

Aquella jornada será recordada por el desconsuelo del suizo, quien rompió en llanto en la Rod Laver Arena antes de asumir la derrota. Y no era para menos. Federer aspiraba en ese momento a igualar el récord de los 14 ‘grandes’ de Pete Sampras pero tuvo que ceder el sexto al mallorquín.

A su pesadilla en Roland Garros, se había sumado la épica Final de Wimbledon 2008 y Australia 2009. Aquella rivalidad tomó el relevo de los McEnroe-Borg o Agassi-Sampras.

Sí, aquel día en el Abierto de Australia cambió la carrera de Rafa por siempre. Ya es monarca en París, Londres y Melbourne. La santa trinidad del tenis: tierra, hierba y cemento. Nadal se proclamaba en un campeón todoterreno.

A diez años de distancia, Federer suma 20 y Nadal 17 títulos, escoltados por el serbio Novak Djokovic, con 15.

Moyá, su gran amigo

Carlos Moyá, también mallorquín e instructor de Nadal, pero principalmente su gran amigo, está consciente de lo que implica este sentimiento de cercanía porque él mismo practicó el tenis desde los seis años y conoce la exigencia de jugar entre los grandes, recordemos que ganó Roland Garros en 1998 y tres Másters Series. Además, formó parte del equipo de Copa Davis, del que fue su capitán en 2014.

Tokio, en su mente

Rafa tiene la intención de participar en la Copa Davis y en los Juegos Olímpicos de Tokio en 2020. Mientras tanto, está volcado en seguir ganando torneos porque lleva la competitividad en su ADN.