La iniciativa del arquitecto Francisco Romero de coleccionar objetos del pasado, lo ha llevado a tener un acervo de más de mil objetos que representan la historia y las memorias de la bella y joven ciudad de Cancún. En entrevista exclusiva con Novedades Quintana Roo, Romero comparte cómo estos objetos se han convertido en historias y sucesos de vida de muchos habitantes de este bello destino.

“Objetos de la memoria es una exposición que se suma a la celebración del 51 aniversario de la ciudad de Cancún, el año pasado se frustraron muchos eventos pero este año es una celebración con sabor a 50 años y la exposición que monté por invitación del Instituto de la Cultura y las Artes y su titular Hugo Álvarez Ruíz, consta de objetos y fotografías que he venido recopilando desde 2014 y que me han llevado a esta colección retro”, detalló el arquitecto, quien presenta cerca de 60 piezas que seguramente removerán sensaciones y recuerdos en la comunidad cancunense.

“Son muchas imágenes en medio de unos 60 objetos que estoy exhibiendo entre libros, objetos como teléfonos, sillas, obras de arte y otros que están haciendo su debut como un tinaco de mil 100 litros de concreto rústico, asoleado y enmohecido, pero que cuando lo cambias de contexto adquiere otra aura que lo hace ver como una pieza escultórica que ha causado admiración, hacen aparición también macetas de la zona fundacional como La Placita, restaurante que estaba en la avenida Yaxchilán y unas butacas del Teatro 8 de Octubre que han hecho llorar a algunos”, dijo.

Esta exposición, además del valor artístico, tiene como objetivo recrear emociones y sentimientos al transportar al espectador a la época en que estos objetos eran útiles.

“Cada objeto que está tiene una historia que contar, como el portafolio del primer gerente de Aeroméxico en 1973, cuando la ciudad apenas comenzaba con algunos vuelos, este señor llamado Carlos Asencio vendía los boletos directo de su portafolio, al que llamaba su oficina, este tipo de objetos nos da una idea de lo difícil y limitada que era la infraestructura de Cancún y de eso se trata, de celebrar a las primeras personas que llegaron a la ciudad y que de alguna manera se den cuenta de lo valioso que fue vivir esa época”.

El horario de visita de esta exposición es de martes a domingo de 10:00 a 18:00 horas en el CCA, con todas las medidas de seguridad, sana distancia y todos los protocolos; sin embargo, para grupos interesados el arquitecto puede dar una visita guiada y esto se coordina a través de sus redes, compartió.

El siguiente paso, El MUREC (Museo Retro de Cancún)

Luego de varios años presentando esta muestra en diferentes espacios de la ciudad, uno de los sueños a concretar para Francisco Romero es dar vida al Museo Retro de Cancún.

“No sé en qué terreno, qué edificio o a qué fundación me voy a arrimar, para pedir los apoyos y poder darle una sede permanente, una o dos salas permanentes y otra sala con exposiciones temporales de gente coleccionista, ya que en Cancún hay muchos interesados. Este acervo, finalmente terminaré donándolo a la ciudad, esto es para sumar con un granito de arena al turismo cultural, tener esa opción para los turistas extranjeros, nacionales o los habitantes locales de conocer la historia de la ciudad a través de sus objetos”, refirió el arquitecto, quien busca difundir el patrimonio intangible, la tradición oral, historias y anécdotas de los objetos que desde 2014 ha recabado.