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MÉRIDA, Yuc.- El pintor Rodolfo Baeza es el primero en proponer y llenar el espacio de un muro de la galería La eskalera, ubicada en el barrio de Santiago, en donde plasmó un mural en acrílico de un rostro, el cual pintó ayer en aproximadamente ocho horas.

Este trabajo fue un evento de convivencia en el arte, ya que mientras Baeza plasmaba poco a poco los trazos, en la pared del patio de la galería, la gente que visitó el espacio pudo observar el proceso creativo del artista y cómo se fue transformando la obra. Rodolfo dijo que le gusta que la gente vea como hace su trabajo, ya que lo retroalimentan los comentarios de las personas, al saber qué es lo que sienten cuando ven sus pinturas. 

La idea surgió cuando Baeza expuso en el pasado mes de diciembre en este mismo lugar la muestra “Estudios de Luz”, una obra que estuvo compuesta de 14 retratos, y luego de desmontarlos observó el enorme espacio de las paredes, por lo que se le ocurrió pintar un mural en la barda del patio, y dejar una obra permanente. Con este aporte, el pintor dejó abierto un nuevo espacio para los siguientes artistas.

Baeza se define como un pintor figurativo, “yo pinto la figura humana, con tendencia realista, me baso mucho en la incidencia de la luz y las sombras, cómo se proyectan en un rostro real. Me gusta que mis pinturas se manchen, que chorreen los colores, que tenga errores, porque eso va generando la particularidad de las mismas”.

En sus inicios comenzó dibujando rostros sin referencia, y poco a poco fue transforman su técnica hacia pinturas con más detalles y derivados de fotografías.