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LONDRES, Reino Unido.- ser parte de la Familia Real Británica no es tan fácil como parece. Existen tantas reglas y protocolos que obedecer que muchas veces los miembros que forman parte de dicha familia terminan siendo personas que en realidad no son.

Meghan Markle y el Príncipe Harry, por ejemplo, no podrán hacer planes para este día de San Valentín debido a que Harry antepondrá un evento que es de suma importancia, razón por la cual estaría lejos de su esposa Meghan Markle en este día tan especial para los enamorados.

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Así que por mucho que tengan que celebrar en el que sería también su último San Valentín sin hijos, a Harry este año no le queda más remedio que retrasarlo todo y dejar sola a su mujer para acudir a un encuentro radicalmente opuesto a lo que cualquiera entendería como una cita romántica: visitar a un cuerpo de militares británicos que se encuentran de maniobras en la fría Noruega.

Este es un grupo amplio de hombres de la Royal Marine que llevan seis meses entrenándose en una base cercana al Círculo Polar Ártico en la que desde su inauguración en 1969, han aprendido técnicas de supervivencia y ataque más de 16.000 marines británicos.

En resumen: el Príncipe Harry pasará el día de San Valentín en su papel de Capitán general del ejército (rol que asumió en 2017 en sustitución de su abuelo Felipe de Edimburgo) acompañará desde el 14 de febrero mientras realizan peligrosas maniobras en un ambiente natural tan hostil que la mayoría de las personas no podrían soportarlo.

Así que Meghan Markle tendrá que pasar San Valentin sin su príncipe, algo que nunca le resultó un problema, pues en su momento, la ex actriz publicó en una ocasión un post en el blog que tenía de soltera donde hablaba de la importancia de amarse a uno mismo y celebrar este día aún sin pareja.