Agencias
LONDRES, Inglaterra.- El ex vocalista de la banda británica Queen, el inglés Freddie Mercury, llevó en los años 80 a la princesa Diana de Gales a un bar gay de Londres disfrazándola como un modelo masculino, según reveló la biografía de la comediante Cleo Rocos.

El libro "The Power Of Positive Drinking", que se publica en partes en el Sunday Times, describió cómo Rocos, Mercury y el comediante Kenny Everett disfrazaron a Diana con una chaqueta y gorro militar, le pusieron lentes oscuros y fueron todos al bar gay Royal Vauxhall Tavern, al sur de la ciudad.

Rocos, que actuaba en el programa televisivo de Everett, afirmó: "Cuando entramos al bar sentimos que obviamente íbamos con la princesa Diana y que ella iba a ser descubierta en cualquier momento".    

"Pero la gente no la reconoció. Ella como que desapareció y eso le encantó por completo", agregó, según reporta la agencia Ansa.    

Rocos desconoce si Diana, que por entonces ya estaba casada con el príncipe Carlos, heredero al trono británico, recibió alguna proposición gay en el bar, y subrayó: "Ella parecía un joven hermoso".

No fue reconocida

La presencia de Mercury, Everett y Rocos desvió la atención de los allí presentes y le permitió a Diana pedir tragos para el grupo en la barra sin ser reconocida, indicó la comediante en su libro.    

Los cuatro permanecieron en el bar por media hora, antes de trasladarse a otro club bailable de Londres.    

La princesa de Gales, que años más tarde haría campaña por los enfermos de sida y se volvió un ícono para los homosexuales, murió a los 36 años en 1997 en un accidente automovilístico en París, seis años después de que Mercury falleciera por padecer VIH.    

La noticia sobre el insólito episodio con Freddy Mercury en el club gay de Londres se conoció días después de que diez vestidos que pertenecieron a Lady Di, entre ellos el de terciopelo azul que lució en 1985 en la Casa Blanca, donde bailó con John Travolta, fueron adquiridos por un comprador secreto dispuesto a pagar cerca de 360.000 dólares por esa única pieza.

Subasta

La subasta londinense de los diez vestidos representó en total cerca de 1.200.000 dólares.    

La pieza principal del lote fue el vestido diseñado por Viktor Edelstein que la princesa lució en aquella cena de Estado, cuando bailó con el actor de "Saturday Night Fever".    

La preocupación de Diana por los necesitados a través de actos de beneficencia, su papel activo en la Monarquía británica y su manera de desafiarla, el publicitado amor hacia sus hijos, y ante todo su fragilidad como persona, le ganaron la admiración y cariño de millones de personas, que la apodaron "Princesa del Pueblo" y "Reina de Corazones".