María José Cantú/Milenio
CIUDAD DE MÉXICO.- Con trayectorias consolidadas en el medio del espectáculo, Itatí Cantoral y Jesús Ochoa gozan de la posibilidad de elegir solo los proyectos que les satisfacen, pero la convicción no está peleada con la buena paga.

“Tengo la fortuna que se han juntado siempre las dos”, asegura Ochoa, “son muchas las características por las que uno elige un trabajo, desde luego una de ellas es el dinero, no hay por qué decirlo con culpa.

“Pero hay trabajos que también se aceptan por gusto y convicción, por lo que dice la obra, en este caso es una obra muy digna, muy buena, que merece todo nuestro respeto. Y muy bien como lo hace Morris (el productor), entonces da más gusto”, agregó el actor sobre la puesta de Mejor Teatro.

Itatí se encuentra en la misma posición, y asegura que no hay razón para ocultar que, como todos, los actores también necesitan dinero. Premisa que los dirige a Idiota, obra de teatro donde comparten protagónico y que se estrenará el 5 de Julio en el teatro Fernando Soler, dentro del centro teatral Manolo Fábregas.

En la historia, un hombre (Ochoa) se convierte en objeto experimetal de una institución y pone su vida en manos de una doctora (Cantoral) que le realizará pruebas psicológicas a cambio de una remuneración económica, esto sucede a través de la comedia que se transforma en un espejo de la crisis social.

Todo lo que transcurra a lo largo de la puesta en escena tendrá una relación directa con el poder del dinero, pero “¿realmente todos los problemas se resolverían si lo tuviéramos?”, se pregunta Itatí durante una reflexión de su personaje.

“Los seres humanos somos muy complicados, esta obra habla de una persona común y corriente que todos los días entrega lo mejor de sí mismo para sacar a su familia adelante. Siendo una comedia ágil, que en una hora pasa por una revolución de emociones, también es muy profunda”, dijo.

“Como actriz, en el proceso de leerla y estudiarla, claro que hay una reflexión. ¿Cambiaría mi vida con dinero?, ¿qué lugar ocupa el dinero en mi pensamiento diario? Es algo inevitable, ocupa parte de tu vida, se vuelve como un familiar al que necesitas, lo buscas, te sientes valorado si lo tienes y si no, sientes que no eres nadie, por cómo se maneja la sociedad. Es un experimento para el mundo”, declaró la actriz.

Ochoa carga a sus espaldas el papel del idiota y para él la palabra tiene múltiples connotaciones que apelan a mucho más que solo humor, pues en la función el público se va a reír, “pero aguas con eso, porque luego no sabes de qué te estás riendo”, advierte.

 “La obra maneja mucho más que humor, incluso tiene algo de thriller, pero volvemos a lo que el teatro nunca ha soltado, que es la condición humana que pone a los dos personajes en una pecera”, declaró Jesús.

“Si a mí alguien me dice idiota no me pongo a reír, es una palabra con un amplio margen. Sí puedes reírte, pero entonces te estás haciendo el idiota, o respondes a eso y te vuelves un idiota consumado, todas esas aristas tiene la obra”, explicó.

El actor agradece formar parte de un espectáculo donde tanto su personaje como el de la actriz que lo acompaña son polos opuestos.

“Los ensayos son de una precisión monstruosa, porque ahí cumples con el texto: la gramatical, la emocional, la de trazo con la escenografía. Si no llegas con el personaje hecho, es complicado”, dijo.

La dirección 

Jaime Matarredona y Nelson Valente comparten la dirección del texto original de Jordi Casanova, ambos trabajan en que Itatí y Jesús se adapten a los altibajos del texto.

"Lo que estamos buscando con los dos es el proceso interno del personaje", explicó Matarredona.

"Son actores que vienen de diferentes lugares, con procesos distintos, entonces nuestra adaptación va por ese lado: tratar de amalgamarlos en escena", dijo.