Matute armó tremenda fiesta en Cancún
En un esperado encuentro, la familia matutera pasó una noche espectacular coreando y bailando éxitos de las décadas de los 80 y 90.
Por más de tres horas Matute puso a cantar y bailar a los miles de asistentes que esperaban con ansia el regreso de la banda, luego de tres años de ausencia y que abarrotaron la Plaza de Toros de Cancún la noche del miércoles como parte de su Planeta Retro Tour 2022.
Hay una fiesta y es esta noche…fue la canción con la que la banda Matute, formada por Jorge D'Alessio, Ignacio Izeta, Pepe Sánchez, Irving Regalado, Tana Planter y Paco Morales, arrancaron la noche y conectaron de nueva cuenta con su familia cancunense.
“Buenas noches ochenteros, esto se va a salir de control”, expresó Tana Planter para dar rienda suelta a un montón de clásicos ochenteros que llevaron al público, en su mayoría “chavorrucos” a un nostálgico viaje que arrancó con el tema de G.I.T. “Es por amor”.
También sonaron los éxitos de Flans y el clásico Bazar, Yo no te pido la luna de Daniela Roma, popurrí tropical de Chico Che, un bloque de JuanGa, temas de LuisMi, Timbiriche, Parchis, y muchas canciones más que hicieron vibrar al público cancunense.
“Queremos pedir una disculpa anticipada si esta noche les agradecemos muchas veces por estar aquí, ver a todos aquí dispuestos a pasar una noche maravillosa es algo que llena nuestro corazón, prometemos hacer vibrar este escenario para cada uno de ustedes. Este concierto va dedicado a la familia ochentera de Cancún”, replicó Jorge D’Alessio, conmovido por ver la plaza de Toros llena.
El momento acústico no podía faltar en el que 6 hermanos, dos pianos y la familia ochentera de Cancún eran los protagonistas, el romanticismo inundó el recinto con temas como Tan enamorados y Quién diría, entre otros, para luego, después del breve descanso continuar con la fiesta a todo.
En medio del concierto Jorge no paró de saludar a su público, agradecer su presencia y regalar gorras autografiadas y cerca de las 2 horas 30 de concierto, amenazaron con despedirse; sin embargo, el público no los dejó y al corear a todo pulmón sus canciones, Matute continuó tocando hasta pasada la medianoche, regalando poco más de tres horas de cariño y agradecimiento sus matuteros.
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