Miranda Priestly: ¿una verdadera villana o la heroína de Andy Sachs?
Varios señalan a Nate Cooper, como la persona que más lastimó a Andrea en ‘El diablo viste a la moda’.
No es sorpresa que ‘El diablo viste a la moda’ de 2006 se haya convertido en un filme referente al mundo de la moda, ya que incluye la belleza y la oscuridad que existe en este ámbito laboral, el cual muchos piensan que es color de ‘rosa’.
El filme de la periodista Lauren Weisberger, nos cuenta la historia de una muy inocente pero trabajadora aspirante a periodista Andrea ‘Andy’ Sachs, quien a pesar de no saber nada de cómo vestirse adecuadamente, recibe una oportunidad de trabajar con la editora de la revista Runway, Miranda Priestly.
Temida pero admirada por su gran talento, Priestly (interpretado por Meryl Streep), espera que sus empleados estén disponibles en cualquier momento, sin importar que sean las 12 o 3 de la mañana, ya que lo más importante para ella, es el trabajo.
La película nos va mostrando cómo poco a poco, Andy va perdiendo aquella sonrisa en el rostro, con tal de complacer a su jefa y demostrarle que no se equivocó en darle una oportunidad.
¿Obsesión o compromiso con el trabajo? El dilema del amor
Algo que hasta hace unos cuantos años causó opiniones divididas, fue el hecho de que algunos señalaban a Miranda como la culpable de que Andy fuera perdiendo a sus amistades e incluso a su novio, Nate Cooper.
Sin embargo, otros consideran que fue la pareja de Andy la culpable de hacerla sentir que básicamente ‘se transformó en lo que juró destruir’ y de arruinar su relación, al ‘venderle su alma al diablo’.
La lenta ruptura de una relación
Al principio, Nate estaba emocionado de ver ese lado sexy que no conocía de su novia, dejándose llevar por su nuevo estilo, pero el momento que colmó su paciencia fue cuando Andy se perdió su fiesta de cumpleaños por culpa de las asignaciones de Miranda.
En este punto de la historia, aunque Nate no lo entendió, Andy se mostró realmente decaída al ver que todo su esfuerzo por tener una vida estable y un trabajo tan exigente al mismo tiempo, resultó en vano.
Conforme avanza la película, los espectadores pueden notar que Andy aprende de sus errores y se adelanta a los pedidos que Miranda pudiera pedirle, terminando por quitarle el puesto a su superior, Emily.
Luego de reemplazar a Emily en la semana de la moda en París, Andy se da cuenta que ha llegado a un punto de su vida en donde su madurez y experiencia, le permiten valerse por sí misma para ir por aquel sueño que dejó pospuesto.
Tras renunciar y encontrar un trabajo en un periódico, Andy se da cuenta que las llamadas a las 3 de la mañana, así como las rupturas del corazón, la convirtieron en una mujer preparada para luchar y soportar las adversidades que se le presenten.
Podría decirse que para Andy, Miranda Priestly fue aquella piedra que sin previo aviso le causó dolorosas caídas y raspones, pero que la motivaron a llegar a la meta, sin importar el dolor que sintiera a lo largo del camino.
Mientras que Nate le demostró que a veces se necesita que alguien nos ayude a abrir los ojos para ver quienes somos realmente y lo que queremos en realidad.
Y tú, ¿consideras que hubo un verdadero villano en la vida de Andy Sachs?
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