MÉRIDA, Yuc.- En los últimos 20 años, desde que se comenzó a usar el concepto del calentamiento global, la fuerza y periodicidad con que ocurren los fenómenos meteorológicos de ha reducido, no sólo de los ciclones tropicales sino también las sequías, lluvias, frentes fríos, turbonadas, ventiscas y tornados. 

La situación no es particular de alguna zona, pues ocurre y afecta a todos los continentes del mundo, aunque cada una padece más uno que otro fenómeno. 

Según un informe de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), en los últimos 50 años se ha producido en promedio un desastre diario provocado por peligros meteorológicos, climáticos o hidrológicos que han cobrado la vida de 115 personas y ocasionado pérdidas diarias con valor de 202 millones de dólares. 

Durante ese periodo, el número de desastres se ha quintuplicado; sin embargo, la mejora y perfeccionamiento de los mecanismos de suministro de información de los sistemas de alerta temprana que en la actualidad se tienen, así como las buenas prácticas de gestión de desastres con que cuentan muchos países, se ha logrado disminuir hasta tres veces el número de muertes ocasionadas por estos fenómenos. 

Cambio climático evidente

Al respecto, el meteorólogo de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), Juan Vázquez Montalvo, indicó que es imposible pasar desapercibido el efecto del cambio climático, lo que ocasiona formaciones más intensas de ciclones tropicales, en categoría 3, 4 o 5 muy destructivos, en ciclos cada vez más cortos. 

Recordó que, por lo general, ese tipo de fenómenos tan devastadores ocurrían a nivel mundial cada 20 o 25 años aproximadamente, pero de dos décadas a la fecha se ha acortado dicho ciclo al grado de que ahora es común que ocurran en cada temporada de ciclones tropicales, es decir, cada año. 

Detalló que en 1933 durante la temporada de ciclones tropicales se agotó la lista de nombres establecidos en el pronóstico, como ocurrió en 2005; pasaron más de 50 años para que la historia se repitiera, sin embargo, se replicó en 2020, 15 años después, y se prevé que este año también ocurran más fenómenos de los pronosticados. 

“Venimos observando que no sólo aparecen ciclones más intensos en periodos más cortos de tiempo entre uno y otro, sino también están cambiando su comportamiento. Entonces vemos que el tiempo de afectación de los ciclones tropicales está haciendo historia en menor tiempo, ya no pasa mucho tiempo para que se repita la historia”, comentó. 

Más personas

Consideró que ante este panorama es importante cambiar la manera de enfrentar este tipo de fenómenos meteorológicos ya que la población ha crecido. 

Agregó que si bien los fenómenos meteorológicos han existido siempre, lo que es nuevo es que ahora provocan mayores afectaciones y muertes debido a que más personas viven en las costas, ciudades y lugares peligrosos como ríos, lagos o zonas vulnerables. 

El especialista recordó la temporada del año pasado la cual fue inédita debido al número de ciclones que se registraron, al número de los que afectaron a la Península y al Estado de Yucatán, así como las inundaciones históricas que ocurrieron y provocaron el rebose del acuífero. 

Para Vázquez Montalvo, es preocupante que la actual temporada presente un comportamiento similar a la del año pasado y se espera la reactivación del fenómeno de “La Niña” cuando transcurre la fase pico. 

Recordó que debido a la fuerza con que se empezaron a registrar dichos fenómenos, nació el concepto de “eventos meteorológicos extremos”, los cuales pueden ser grandes lluvias, ventiscas, nevadas, tormentas, huracanes, sequías, entre otros. 

“Actualmente no hay enemigo pequeño con los huracanes, pues ahora desde que sea depresión tropical, tormenta o huracán moderado, es suficiente para con sus lluvias provocar desastres en cualquier parte del mundo”, concluyó.

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