MÉRIDA, Yucatán.- Este año, entre 20 y 25 niños que reciben tratamiento en la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer (Amanc) Yucatán lograron pasar a la fase de vigilancia, que dura alrededor de cinco años, para ser considerados como sobrevivientes de cáncer.

La presidenta de Amanc, Marissa Goff Rodríguez, dijo que luego de finalizar la etapa de quimioterapias, que dura de dos a tres años, los pacientes pasan a la siguiente durante la cual se mantendrán bajo observación médica y continuarán con sus visitas periódicas para vigilar que la enfermedad no se presente de nuevo.

“Este año, a pesar de todas las dificultades que todos hemos pasado con el Covid, Amanc nunca cerró, al principio teníamos el albergue lleno, pero fue bajando porque los oncólogos ya no los citaban a menos que fuera un niño al que le urgía tratamiento o se pusiera mal, esto para proteger a los menores”, comentó.

Destacó que pese al difícil panorama que se vivió durante todo el año, desde mediados del mes de marzo, por el coronavirus, la atención a los 180 niños que acuden al albergue no se detuvo: se realizaron actividades para recaudar fondos de manera virtual, se recibieron donativos en especie, así como los de los donadores mensuales, y se establecieron nuevas estrategias para contrarrestar el desabasto de medicamentos oncológicos.

Agregó que durante los primeros meses de la pandemia la incertidumbre, el miedo y la desesperación fueron el común denominador entre los integrantes de la asociación y entre los padres de familia, sin embargo, todo se acomodó para continuar la labor altruista que realizan.

Goff Rodríguez lamentó que así como hubo niños que lograron pasar de etapa, también hubo aproximadamente 12 que fallecieron durante el tratamiento de quimioterapias.