Braulio Carbajal/Milenio
MÉXICO, D.F.- La debilidad económica mundial, en particular la que enfrenta México desde hace más de un año, ha provocado que las personas reduzcan el ahorro para su retiro, afirmó Esteban Martínez, director de productos de inversión de HSBC.

De acuerdo con el estudio “El futuro del retiro”, elaborado por el banco inglés, 44 por ciento de las personas que estaban a punto de jubilarse perdieron su empleo, mientras que 39 por ciento manifestó que su capacidad de ahorro se ha visto afectada.

“A pesar de las recientes señales de recuperación, el ahorro para el retiro continúa siendo impactado por la desaceleración económica global. Mucha gente en edad laboral ha dejado o ha reducido su ahorro para el retiro en inversiones”, apunta el documento.

En 2013 el producto interno bruto del país creció 1.1 por ciento, mientras que para 2014 la Secretaría de Hacienda estima que lo haya hecho entre 2.1 y 2.6 por ciento.

Aunado a lo anterior, a inicios del año pasado entró en vigor la reforma hacendaria, la cual presionó las contribuciones de las personas de clase media e inclusive disminuyó algunos incentivos para el ahorro voluntario, como por ejemplo menores deducciones.

Martínez subrayó que respecto a otras naciones, México presenta un nivel bajo de ahorro para el retiro, por lo que es importante hacer conciencia entre la población para que, independientemente de que haya o no recesión, siempre destine una parte de su sueldo al ahorro.

La inflación también juega un papel relevante para las personas próximas a jubilarse, toda vez que 54 por ciento tiene la percepción de que su ingreso no sigue el ritmo del costo de vida; es decir, los precios de los productos se incrementan a una mayor velocidad respecto al salario.

El panorama para el retiro de los mexicanos no luce nada alentador, pues el estudio de HSBC indica que casi la mitad de las personas en edad laboral no ahorra para la jubilación y tampoco pretende empezar a hacerlo. Más preocupante aún es que 40 por ciento de las personas que están a un paso de hacerlo se encuentran en la misma situación.

Aparte de la desaceleración económica, otros contratiempos que afectan la capacidad de ahorro son el endeudamiento y el desempleo, las enfermedades y los accidentes, pagar la educación de los hijos y hasta empezar una familia.