Una etiqueta te dice si tu bebida fue adulterada

El proyecto ganador del concurso Imagina Cuervo, además de ayudar a combatir el mercado informal de los vinos y licores, no es contaminante.

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En el concurso realizado por Casa Cuervo resulto ganador el proyecto Tecnología y Desarrollo NFC, el cual ayuda a saber si una bebida fue adulterada. Imagen de contexto. (facebook.com/jctradicional)
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Karina Palacios/Milenio
MÉXICO, D.F.- Los integrantes del proyecto Tecnología y Desarrollo NFC arrasaron con la competencia en el concurso Imagina Cuervo con la propuesta de una etiqueta que envía al celular de un consumidor una alerta si la bebida que compra es adulterada.

Los ganadores fueron premiados con 300 mil pesos para poder comercializar su proyecto y tres meses de asesoría para la incubación de su empresa.

El proyecto fue presentado en la competencia organizada por la firma Casa Cuervo en Tequila, Jalisco. 

Las calcomanías NFC (sigla en inglés de Comunicación de Campo Próximo) son amables con el medio ambiente, además de ayudar a combatir el mercado informal de bebidas alcohólicas.

La etiqueta NFC funciona a través de una aplicación de celular que registra el producto que se va a consumir y, en caso de ser de mala calidad o que la botella haya sido rellenada con alcohol adulterado, envía una alerta.

Piratería de bebidas

David Sánchez, quien está a la cabeza de la iniciativa galardonada, aseguró que su desarrollo es de gran utilidad tanto para la empresa como para el consumidor, ya que si se hace un uso ilegal de la botella ambas partes pierden.

“El problema de la piratería perjudica a la empresa, que pierde dinero y se va acumulando el daño, ya que una de cada tres botellas son pirata; pero además, se generan daños en el consumidor, principalmente a la salud”, afirmó.

Christian Michel, especialista en diseño y uno de los organizadores del concurso,  comentó que recibieron más de 350 proyectos de toda la República Mexicana, los cuales fueron presentados por jóvenes apasionados de la tecnología en busca de propiciar el consumo responsable de bebidas alcohólicas. Para la etapa final de la competencia seleccionaron seis.

Otro proyecto finalista, por ejemplo,  fue el Guardián-Ángel, de Aníbal Bustillos, que consiste en un dispositivo  que se conecta al motor del automóvil con una aplicación telefónica para realizar al conductor una prueba de alcoholímetro;  si reprueba, el motor de su auto no arranca.

En caso de que el usuario intente “hacer trampa”, explicó bustillos, la aplicación también puede hacer una prueba de manejo y si se cometen tres “acciones bruscas”, como variaciones de aceleración, el auto envía una alerta en la que se detiene y manda un mensaje a un taxi y a algún familiar.

Los finalistas de la competencia Imagina Cuervo se trasladaron al municipio de Tequila, Jalisco, donde se encuentra La Rojeña, una de las destilerías más populares del mundo que pertenece a Casa Cuervo.

Importancia del concurso

El concurso se realizó con el objetivo de crear un prototipo que ayude al combate de problemas ocasionados por el abuso en el consumo de alcohol, la venta a menores y la piratería.

Según datos del Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes, alrededor de 15 mil jóvenes de entre 14 y 29 años mueren anualmente en México como consecuencia de percances viales y actos violentos relacionados con el abuso de esas bebidas.

Otro peligro del consumo de alcohol adulterado es que puede provocar ceguera, intoxicación, alteración cerebral e, incluso, la muerte. Ante esa situación, los participantes de Imagina Cuervo buscaron combatir el uso inadecuado del alcohol.

Jorge Camacho, uno de los promotores de la competencia y especialista en innovación,  afirmó que cada vez más empresas se unen a este tipo de acciones, en las que buscan emprendedores para innovar una marca, un producto o un servicio.

“A esta generación no le interesa solo lanzar proyectos exitosos o financieros, son jóvenes que constantemente tienen el interés de mejorar el mundo, en este tipo de proyectos es donde se les permite utilizar sus habilidades y conocimientos”, señaló Camacho.

Los concursantes pasaron 48 horas en el proceso de creación, diseño y pulido de proyecto, encerrados en el salón Real del hotel Solar de las Ánimas; durante ese tiempo se turnaban para descansar, comer y dormir.

Linda Novato, encargada de aterrizar las ideas de los concursantes, se mostró emocionada por los resultados revelados, “pues desde el principio fueron proyectos muy ambiciosos y aún así hicieron lo posible por que su dispositivo superara sus propias expectativas.

“Estuvieron aislados, no hubo distracción de los papás, de los amigos, estuvieron lejos de casa, toda la concentración se llevó a cabo en un salón”, finalizó.

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