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JALISCO.- Un funcionario del gobierno federal utilizó a un grupo de empleados a su cargo para remodelar dos veces las instalaciones de un rancho de su propiedad en el estado de Jalisco.

De acuerdo a Infobae, gracias a una denuncia anónima, la Secretaría de la Función Pública, entidad responsable de investigar irregularidades y presuntos actos de corrupción de funcionarios público, supo del caso y abrió una investigación en contra de Geronimo Corona Alcalá, gerente de la dependencia estatal Linconsa.

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Las autoridades federales decidieron suspender el cargo a Corona Alcalá, en tanto llevan a cabo la indagatoria para comprobar si este servidor público utilizó a 40 empleados de Linconsa para llevar a cabo trabajos de albañilería, alumbrado, jardinería y pintura en su rancho, donde preparaba una fiesta.

Por lo pronto, Corona Alcalá ya se ganó la etiqueta de #LordLiconsa en redes sociales, donde los usuarios en México han combinado la indignación y la mofa por el caso.

De acuerdo con la información, el gerente de Liconsa en Jalisco recurrió dos veces a trabajadores de la dependencia para remozar su rancho. La primera vez ocurrió el 17 de agosto, cuando mandó a un equipo, en horario de oficina, al municipio de Acatlán para trabajar en la hacienda El Plan de Corona, de su propiedad.

Corona Alcalá les pidió llevar a cabo los trabajos, antes de una fiesta que ofreció el 21 de agosto y a la que asistieron Abelardo Manzo González, director de Liconsa en el país; José Luis Mata Bracamontes, delegado de la Secretaría de Gobernación en Jalisco, y Gabriela Vázquez Flores, delegada de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en la entidad.

Un día después, la Secretaría de la Función Pública recibió la queja a través del Sistema Integral de Denuncias Ciudadanas. La persona acusó al servidor público de haber usado recursos de Liconsa para beneficio propio.

Corona Alcalá, por su parte, afirmó que las imágenes publicadas en medios habían sido modificadas por computadora. "Ahora con el Photoshop hacen casi casi lo que quieren, y más los que se dedican a eso", dijo.

Ante lo ocurrido, la Secretaría de la Función Pública ordenó un mes de suspensión para Corona Alcalá, a partir del 6 de septiembre. Sin embargo, hay indignación en la dependencia, pues al funcionario le mantuvieron su salario de 78.000 pesos mensuales.

"La suspensión es una medida cautelar que no prejuzga sobre las probables responsabilidades administrativas del involucrado", aclaró la dependencia en un comunicado.