Padres de los 43 dicen que no querían ver al Papa
El vocero de los familiares de los normalistas, Felipe de la Cruz, rechazó que buscaran un encuentro con el Pontífice, como aseguró el abogado.
José Antonio Belmont/Rúben Mosso/Milenio
CIUDAD DE MÉXICO.- La visita del Papa Francisco a México dejó al descubierto las discrepancias entre los padres de los normalistas de Ayotzinapa; luego de que el vocero, Felipe de la Cruz, negó que buscaran un encuentro con el líder de la Iglesia católica, como aseguró su representante legal Vidulfo Rosales.
En entrevista, el vocero de los familiares de los 43 normalistas señaló que no buscaron reunirse con el Papa durante su visita a México y que, "en realidad", nunca tuvieron interés para tener dicho acercamiento, al considerar que "lo que diga (el Pontífice) ya nos tiene sin cuidado".
Agregó que en cuestiones religiosas los padres de los estudiantes son muy respetuosos; sin embargo, consideró que el Papa sabe que les falló y ahora va a buscar "muchas justificaciones", incluido el decir que hay divisiones entre el movimiento, lo que rechazó tajantemente.
"Seguimos en la misma postura de saber la verdad, jamás han existido conflictos entre nosotros, si no ya no existiera (el movimiento). Él (Francisco) va a buscar justificaciones, sabe que le falló a los padres, y también entendemos que obedece a un sistema y tiene que caminar por ahí".
De la Cruz consideró que desde el inicio del movimiento, hace casi año y medio, el gobierno ha buscado desprestigiarlo, pero aún así se ha mantenido unido, por lo que "lo que él (el Papa) diga ya nos tiene sin cuidado, porque a nosotros nos interesa saber qué pasó en realidad con los 43".
Consideró que el verdadero objetivo de la visita era distraer la realidad que se vive en México, donde se mantienen los muertos y la economía se desploma.
"Si en verdad hubiera venido con la intención de que los feligreses católicos escucharan la palabra alentadora de su representación, pues lo primero que tocaría sería a los padres de familia que viven una situación crítica emocional y ni siquiera se acordó de mandar un mensaje para ellos, pero para nosotros está clara la situación del Papa, no nos distrae, nos preocupa saber qué pasó ese 26 de septiembre”, resaltó.
De la Cruz reiteró que solo les importa a los padres de familia conocer los avances de la unidad especializada que se creó derivado del caso, y que en próximos días se reunirán con autoridades de la PGR para que se las informen, y "esperamos tengan buenas noticias para nosotros".
Por el contrario, el abogado de los padres, Vidulfo Rosales, culpó al gobierno federal de que no se concretara la reunión del Papa con las organizaciones de familiares de desaparecidos, durante la visita del pontífice a Ciudad Juárez, Chihuahua.
Rosales aseguró que fue el gobierno el que alentó que no se llevara a cabo el encuentro con el líder católico, a quien le hizo creer que las agrupaciones están enfrentadas.
"De lo que dijo el Papa, respecto a la lucha entre organizaciones, nosotros, como lo dejamos claro desde un principio, no tenemos problema con alguna organización, con los compañeros de los otros desparecidos, tenemos una relación buena con ellos, entendemos que son luchas distintas, ellos traen un proceso que data de muchos más años, ellos traen una lógica, trabajan en el tema de la Ley General sobre Desaparición Forzada, en un proceso muy propio que ellos conocen. Nosotros no sabemos ese proceso; sin embargo, lo apoyamos…
"Entre las víctimas de los desaparecidos, el anhelo es el mismo, es la presentación con vida de ellos. Nosotros vemos una obstaculización del gobierno para evitar que los padres de familia pudieran tener un acercamiento con el Papa, una entrevista, por muy mínima que fuera, y se sigue en esa línea (por parte del gobierno), por un lado, de alimentar una división que no existe con los otros desparecidos, en querer alimentar esta idea de que no pueden recibir a los 43 porque no son víctimas especiales, víctimas de primera", dijo en conferencia de prensa tras reunirse con la procuradora Arely Gómez.
El abogado subrayó que la visita del Papa les dejó un sabor "agrio", porque esperaban unas palabras de aliento, pero el pontífice dejó un vacío, porque no hubo un mensaje sobre los desaparecidos.
Dijo que resulta desesperanzador que no se haya dado un mensaje en Ciudad Juárez, al ser un lugar donde hay cientos de desaparecidos y pudo hacer un pronunciamiento, no solo de los 43; sino de los desaparecidos en nuestro país. "Deja un vacío en las víctimas de más de 27 mil desaparecidos, deja un desconsuelo, un sabor agrio de que no se haya dado un mensaje".
En entrevista para Milenio Televisión, Rosales dijo que por cuestiones de salud, Felipe de la Cruz no estuvo presente en las reuniones para ver al Papa.
“Ahorita se encuentra un poco mal de salud (Felipe de la Cruz) y no estuvo presente en estos intentos de reunirse con él (con el Papa), pero hubo unas reuniones. Se hizo en una asamblea y ahí se determinó darle importancia y necesidad a ese acercamiento, de hecho se busco un acercamiento con el centro Prodh y los jesuitas”, dijo.