Agencias
MÉXICO, DF.- La Cámara de Diputados dejó atrás cuatro de los seis periodos ordinarios de la actual legislatura y en ese lapso registró un rezago de mil 173 proyectos de ley sin dictaminar.

Además, permanece en la espera de las leyes secundarias de telecomunicaciones y política electoral, atoradas aún en el Senado.

Con las tres iniciativas de legislación energética que el Ejecutivo Federal puso a consideración de los diputados federales el último día de abril, la 62 Legislatura ha dado entrada a dos mil 226 proyectos de ley, de los cuales ha dictaminado y votado en el pleno 323, para alcanzar una efectividad de apenas 14.51 por ciento en 20 meses de gestión.

Las comisiones ordinarias desecharon a su vez un total de 730 iniciativas presentadas por diputados, senadores y legislaturas locales, con lo cual redujeron el rezago acumulado en la “congeladora” desde el 1 de septiembre de 2012.

En contraste con los primeros tres periodos ordinarios de la 62 Legislatura, el celebrado entre el 1 de febrero y el 30 de abril de este año incumplió las expectativas generadas por los propios grupos parlamentarios.

Después de las 16 reformas constitucionales aprobadas en igual número de meses, los diputados y senadores en funciones se propusieron resolver más de 50 leyes secundarias en 90 días.

El resultado: una aprobada, la Ley Federal de Competencia Económica, y medio centenar pendientes, entre energéticas, de telecomunicaciones y electorales.

De acuerdo con el seguimiento mensual de MILENIO Diario al desempeño de la Cámara de Diputados, el promedio de asistencia inicial a las sesiones se mantuvo alrededor de 60 por ciento (300 de los 500 legisladores), y el registro promedio en el tablero electrónico al momento de las votaciones fue de poco más de 80 por ciento (400 de los 500 legisladores).

La Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados conformada por los líderes de las siete fracciones parlamentarias (PRI, PAN, PRD, PVEM, Movimiento Ciudadano, PT y Nueva Alianza) acordó al comienzo de abril convocar al pleno a sesionar todos los días después del “puente” vacacional de Semana Santa.

No obstante y debido al “atorón” de las leyes secundarias en el Senado, los diputados modificaron su calendario y sesionaron sólo seis de los nueve últimos días del mes pasado.

Así, el pleno camaral en el Palacio de San Lázaro sumó 690 horas efectivas de trabajo —equivalentes a casi 29 días completos— durante un año y ocho meses en funciones.

Según el presidente de la Cámara de Diputados, José González Morfín, la actual legislatura será recordada como la más productiva de los últimos tiempos:

“Cuando se analice la productividad de esta legislatura, comparada con otras, esta legislatura va a ser por mucho la más productiva de los últimos tiempos en México. Esto habrá que valorarlo cuando concluyamos”.

Los coordinadores de los diputados del PRI, Manlio Fabio Beltrones; del PAN, Luis Alberto Villarreal, y del PRD, Silvano Aureoles, sostienen a su vez que los pendientes en el Palacio de San Lázaro son mínimos, aunque en comisiones duermen el sueño de los justos minutas como la reforma constitucional para crear el nuevo organismo nacional anticorrupción y corregir las deficiencias estructurales de la Ley contra la Trata de Personas, entre otras.

(Con información de Fernando Damián/México)