Juan Alberto Vázquez/Milenio
CIUDAD DE MÉXICO.- A la una de la tarde con 58 minutos del lunes 15 de agosto subió a su cuenta de Twitter un mensaje que sonaba desesperado: “Queremos medallas, ca..., doy servicio gratis al medallista olímpico que alegre a #México, @Rio2016  @juegosolímpicos”. En ese momento se cumplía el décimo día de la justa con el casillero mexicano aún en blanco, y un alud de críticas y desilusión caían sobre la delegación entera. 

Queremos medallas cabrones, doy servicio gratis al medallista olímpico q alegre a #Mexico @Rio2016 @juegosolimpicos pic.twitter.com/2WybdbCxwz

— Paola Escort Vip (@Paola_for_men) 15 de agosto de 2016

Dos horas después del tuit lanzado, Misael El Chino Rodríguez aseguraba la medalla de bronce en boxeo, con lo que la propuesta de la escort se volvió viral y en las siguientes 48 horas el hecho fue retomado por decenas de diarios en todo el continente. 

Para quienes no la conocen, que la señalaron como “oportunista” y llenaron de insultos su bandeja, puede parecer que Paola, con 62 mil seguidores en @Paola_for_men, buscó colgarse de la fama de un medallista para apuntalar su negocio, espejismo que creció luego de que aparecieran las entrevistas (la primera de todas, vía telefónica, con Liliana Sosa en MILENIO Televisión) en los días posteriores a la oferta lanzada.

La grey que sigue de cerca su “carrera” sabe que la angustia de Paola era sincera y que ese sentimiento se reforzó en el tuit tras conocerse la medalla de Misael.

“Soy, persona seria y de palabra. Yo si cumplo mi promesa, servicio gratis al medallista olímpico”. Porque si uno revisa su timeline verá que en los días previos ella ayudó con los útiles escolares a varios niños de bajos recursos, adoptó un perro golden abandonado y dio de comer a otro solovino hallado afuera de un Oxxo.

Hice escala para cargar gasolina y vi un perrito tan bello. Le di de comer.
Voy a #Guadalajara Besos mi gente. pic.twitter.com/XK3OI37awi

— Paola Escort Vip (@Paola_for_men) 17 de agosto de 2016

Desde un hotel en Guadalajara, aclara que su actitud “nace del agradecimiento que tengo con la vida, por todo lo que me ha dado”. Cuando le pedimos que enumere otras de sus acciones de auxilio ataja: “Sinceramente, mi amor, no me gusta mucho eso de hacer el bien y gritarlo a los cuatro vientos, pero lo cierto es que hace falta más generosidad y menos gente envidiosa”.   

Por estas semanas, Paola realiza una gira a la que nombró Abriendo caminos, cuya dinámica consiste en viajar por varias ciudades, hospedándose en un hotel o motel de paso y aguardar la llegada de clientes, muchos de ellos ya viejos conocidos.

“Este medio es muy difícil y se requiere ser una persona con deseos de salir adelante, tener claros los conceptos de seguridad, pero además hay que ser innovador y usar el cerebro”. y agregaría que, además, no tomársela tan en serio.

El viernes 26 de agosto avisó a sus seguidores que dejaría momentáneamente el celular: “Mis amorcitos. Los dejo un poquito pues el deber me llama en la habitación número 10. A ganar plata con el sudor de mis bellas nalgas”.  

Tampico, Veracruz, Pachuca, Puebla, Ciudad de México y Toluca son su destino en las dos semanas del domingo 11 al sábado 24 de septiembre. Hay temporadas que viaja al Caribe mexicano o si se le antoja se va de periplo por el Pacífico: Sinaloa, Nayarit, Colima. Confía en que otro secreto es tener un equipo de trabajo en el que eventualmente contrata los servicios de un estilista, un fotógrafo, un asistente personal y un encargado de mercadotecnia. Toda una pequeña empresa para la industria de entretenimiento para adultos.

Sus auxiliares le ayudan a coordinar citas vía red social o WhatsApp, que es por donde cierra los negocios. “A Twitter le debo mucho, es un medio publicitario, quizá muy cansado porque debes dedicarle mucho tiempo, pero al final de cuentas rinde frutos pese a que de repente uno se encuentra a cada patán, o locos quitatiempo, pero esto es así: hay que tener el tacto de saber reconocer quién es un cliente inmediato, cuál uno futuro o incluso a los pajeros”.

Al ser cuestionada de cómo lo intuye, respondió: “Cuando es por teléfono me ayudan el tono de voz, la forma como se expresan o como piden información. Si es por WhatsApp, me fijo incluso en cómo escriben, la ortografía”.

El pasado lunes 12 de septiembre, contó en 24 tuits la historia de un “importante y muy bien custodiado caballero” que la contrató en Querétaro. Le habló y la citó en un motel y cuando llegó, vio que había muchos guardaespaldas cuidando a su cliente, quien resultó ser una celebridad, además de “muy espléndido $$$$, y debo decirlo, pude habérmelo co... sin recibir un solo peso”.

Sin saber la identidad del famoso cliente, sus seguidores se quedaron con la duda de si era un músico, un político o un comunicador. Alguien a quien no le importó desprenderse de una buena cantidad de dinero, un Moët&Chandon y un whisky, en un ameno encuentro de dos horas.

No muy convencida, Paola dice que tiene poco más de seis años en los servicios de escort y que no sabe cuántos más durará, “pues otros negocios casi me obligan a retirarme, pero me resisto”.

Su tarifa es de tres mil pesos la hora y aunque señala que hay días que no tiene un solo cliente, en otras ocasiones su agenda se llena, por lo que debe bajar la cortina, cosa que sucedió el 18 de agosto en Guadalajara y el 27 del mismo mes en Aguascalientes.

Al preguntarle sobre cuáles considera que son las razones de su éxito, pone su profesionalismo como mayor virtud. “Uno debe dar lo mejor de sí; brindar ese servicio como si fuera siempre el último”. Ya antes había soltado una idea similar en la red social del pájaro azul: “Ser #Escort es también ser #Actriz. Puede tu mundo estar derrumbado pero tu actitud siempre debe ser la mejor, el cliente paga por eso”.

Además del Buchanan’s 18, el mayor gusto que se da Paola es su colección de autos que va cambiando en cada viaje, por comodidad, pero también por seguridad. De sus comentarios se desprende que incluso tiene un lote y que ha ayudado a varios ciudadanos a regularizar sus carros chocolate. Acepta su preferencia por los de 8 cilindros: “Me gusta sentir la potencia y adrenalina de un buen motor en una carretera en buen estado: es casi como tener un orgasmo”.

Paola se retiró y dejó sin responder algunas preguntas relativas a su edad, su lugar de nacimiento (“soy de todos lados”) y de residencia; tampoco aclara si alguno de los medallistas olímpicos ya pasó a cobrar o su gesto se quedará envuelto para regalo. Mientras tanto su leyenda crece.