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MÉXICO.- La Procuraduría General de la República (PGR), tiene una investigación abierta que apunta a que mujeres están tomando el control del grupo criminal Guerreros Unidos, una escisión del Cártel de los Beltrán Leyva, así lo indica El Universal en una nota.

De acuerdo a Regeneración, la mayoría de las mujeres al mando, serían las esposas de los líderes de la organización que han sido detenidos.

Con perfil bajo, las mujeres, algunas esposas de los Carrubias Salgado, han ido tomando el control de las decisiones al interior del cártel que la DEA consideró entre uno de los que más han extendido su dominio en Estados Unidos. 

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Dentro de la nueva conformación, las esposas de los sicarios fungen como mandos pero también como halcones.

Cabe mencionar que la toma del poder femenino en esa organización viene desde María de los Ángeles Moreno, esposa del exalcalde de Iguala, José Luis Abarca, quien era la principal operadora financiera y junto con su esposo, trabajaban desde la presidencia municipal, de acuerdo con la declaración de Sidronio Casarrubias Salgado, máximo líder de Guerrero Unidos, detenido por la desaparición de los 43 normalistas de Ayotizinapa en septiembre de 2014.

En abril de ese mismo año, Mario Casarrubias, El Sapo, fue detenido en Toluca y Sidronio, su hermano, tomó el control de la organización que opera principalmente en Guerrero, Estado de México y Morelos, hasta que el 17 de octubre de 2014, Sidronio fue detenido en el Estado de México y entonces, quien tomó el poder fue su hermano Adán ‘El Tomate’, quien mantiene la disputa con la organización Los Rojos.

Ahora, se menciona que las mujeres que probablemente tomaron el poder de Guerreros Unidos, son las relacionadas con Sidronio Casarrubias Salgado, El Chino, Mario Casarrubias Salgado, El Sapo, Adán Zenen Casarrubias Salgado, El Tomate, y José Ángel Casarrubias Salgado, El Mochomo.