Familia y vecinos despiden a Toñito, víctima de su propio vecino

El féretro de Toñito recorrió las calles del pueblo y su escuela en San Pedro Zictepec, municipio de Tenango del Valle, donde recibió un homenaje.

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Entre muestras de dolor y reclamos de justicia, habitantes de San Pedro Zictepec, en el municipio de Tenango del Valle, Estado de México; acompañaron el cortejo fúnebre de Toñito, el niño de nueve años cuyo asesinato a manos de su vecino sacudió a toda la comunidad.

Con globos blancos y flores en mano, familiares, amigos y compañeros de escuela recorrieron las calles del pueblo rumbo al panteón, donde el pequeño fue sepultado.

 

El cuerpo de Toñito fue llevado en un ataúd blanco hasta el camposanto, después de un emotivo homenaje en la escuela donde estudiaba. Durante la despedida, docentes y alumnos recordaron al niño como alguien alegre y lleno de vida.

“Sus juegos con sus amigos, su risa, sus alegrías en el futbol, sus esperanzas, sus travesuras, su convivencia con su mascota, el juego con sus hermanos, su gusto por las redes sociales y sobre todo, sus sueños y su relación tan fuerte de amor con su abuelita que no se detendrán jamás porque reviven en cada niño de nuestra comunidad”,

expresaron sus maestros en un mensaje que conmovió a los presentes.

La tristeza y la indignación aumentaron al conocerse que el principal sospechoso del crimen es Mario, vecino de la familia del menor, quien permanece detenido mientras se define su situación jurídica.

Pobladores señalaron que incluso participó en las labores de búsqueda tras la desaparición de Toñito, sin mostrar señales de culpa. “El enemigo estaba en casa”, lamentaron algunos de los asistentes.

De acuerdo con la Secretaría de Seguridad del Estado de México, el niño fue visto por última vez el 19 de marzo, cuando salió a jugar maquinitas. Un día después, las autoridades localizaron su cuerpo sin vida dentro de un tinaco en la vivienda de Mario.

La detención del presunto responsable ocurrió en las inmediaciones de “Los Manantiales”, donde agentes de seguridad notaron su comportamiento sospechoso. Durante la revisión, portaba un cuchillo y un teléfono celular.

Por ahora, el proceso legal sigue en curso. Mientras tanto, la comunidad exige justicia para Toñito y que el caso no quede impune.

(Con información de redes sociales)

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