La familia de Merari Noemí García Mejía, una joven de 19 años desaparecida en mayo de 2024 en Jalisco, identificó sus pertenencias entre los objetos asegurados en el rancho Izaguirre, en Teuchitlán.

Este sitio, según colectivos de búsqueda, habría sido utilizado como campo de tortura vinculado al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Rubí García, hermana de Merari, explicó en entrevista con Azucena Uresti que la joven desapareció el 20 de mayo tras recibir una oferta de trabajo con un salario de seis mil pesos semanales.

#ZONAEstatal | Identifican prendas de Merari Noemí en el rancho Izaguirre ☹️🚨

El 20 de mayo del año pasado la joven de 19 años, salió de su casa para comenzar un trabajo como guardia de seguridad privada, prometiéndole un sueldo de 6,000 pesos semanales. Un auto de plataforma… pic.twitter.com/cajh1FSoMx

— ZONA 3 (@zona3noticias) March 19, 2025

“Le ofrecieron cubrir transporte, hospedaje y alimentos, además de clases de defensa”, relató.

El día de su desaparición, Merari tomó un Uber y compartió en Facebook imágenes de su trayecto, incluyendo sus maletas y tenis. Desde entonces, la familia no volvió a tener noticias de ella.

Según la Policía Cibernética, su última llamada fue en la nueva central de Tlaquepaque, pero la Fiscalía no encontró indicios relevantes en su línea telefónica.

Familia continúa búsqueda de Merari tras reconocer sus pertenencias

La familia supo del aseguramiento del rancho Izaguirre hasta el 5 de marzo de 2025, cuando Rubí reconoció en una transmisión del colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco los tenis, la maleta y una biblia que su madre le había regalado.

La Fiscalía informó que los restos hallados en el sitio fueron calcinados a temperaturas extremadamente altas, lo que dificultaría obtener ADN para su identificación.

A pesar de ello, la familia de Merari sigue exigiendo respuestas y continuará con su búsqueda hasta esclarecer su paradero.

Con informaciòn de Proceso