Cayó 'La Tuta', el señor del feudo de Michoacán
Expertos creen que la organización delictiva se dispersará y 'Los Viagras' podrían sucederlos en el control del territorio.
Agencias
MÉXICO, D.F.- Su nombre era conocido por todo Michoacán, mas su paradero completamente ignorado. Nadie sabía dónde estaba el 'señor' que mantenía a buena parte del estado sumido en la zozobra a pesar de que aparecía en varios videos en reuniones con alcaldes y funcionarios, y otros tantos donde repartía dinero y la gente le besaba las manos como a un representante de Dios. Fueron meses de persecución, hasta que el viernes, 'La Tuta' por fin cayó.
Servando Gómez, un ex maestro de escuela que se convirtió en uno de los narcotraficantes más poderosos y buscados de México y jefe del temido cartel de Los Caballeros Templarios, fue capturado en las primeras horas del viernes por la Policía Federal.
Gómez fue detenido en una casa en Morelia sin que se haya disparado un solo tiro, de acuerdo con un funcionario que habló a condición de anonimato porque no estaba autorizado a discutir el caso públicamente. Dijo que la operación fue posible luego de un intenso trabajo de inteligencia de meses que involucró a varias instituciones de seguridad.
"Con esta detención se fortalece el Estado de Derecho en el país y seguimos avanzando hacia un México en paz", dijo el presidente Enrique Peña Nieto a través de su cuenta de Twitter.
"La Tuta", de 49 años, por el que se había una ofrecido una recompensa de varios millones de pesos, es el último de los líderes del grupo criminal diezmado después de meses de continuos golpes a la organización, que también terminaron con la vida de quien la había liderado originalmente, Nazario Moreno.
En un operativo simultáneo, su hermano Flavio fue capturado en la ciudad de Mérida, Yucatán, estado conocido por su imperante tranquilidad y baja incidencia delictiva.
Flavio era el administrador de los bienes de la familia Gómez Martínez, y al momento de su aprehensión tenía un arma larga, una corta y dosis de droga.
Pueblo a pueblo
Desde su creación, Los Caballeros Templarios, grupo escindido del cartel de La Familia, mostró ciertas inclinaciones seudo-religiosas y llegó a tener un control casi total de las actividades políticas y económicas del próspero estado de Michoacán.
Sus relaciones con la política han sido intensas. Varios funcionarios estatales fueron detenidos en el último año por presuntos nexos con ese cartel, incluido Jesús Reyna, quien fuera secretario de gobierno y gobernador interino de Michoacán.
El poder de Los Caballeros Templarios recién comenzó a disminuir cuando un movimiento de civiles armados, las autodefensas, decidió tomar las armas a principios de 2013 y enfrentarse a la organización.
Conformadas por agricultores, empleados y presuntos miembros de otras organizaciones criminales, las autodefensas tomaron el control del estado, pueblo a pueblo, en una zona que controlaban los Templarios y obligaron al gobierno federal a organizar una auténtica ofensiva contra ellos.
Servando Gómez siempre ha dicho que las autodefensas trabajan para el cartel del vecino estado de Jalisco, interesado en penetrar en Michoacán.
La captura llega en un momento providencial para el gobierno. Peña Nieto enfrenta una crisis por la desaparición de 43 estudiantes a manos de la policía y la polémica generada por el posible conflicto de intereses por la compra de su casa y la de su secretario de Hacienda a contratistas del gobierno estatal, que él presidió antes de ser elegido presidente.
Tras la caída de su líder, Los Templarios quedan muy debilitados y su futuro es incierto. "No se conoce que haya un sucesor fuerte y han estado muy golpeados en sus estructuras por las autodefensas y por la ofensiva gubernamental", dijo a The Associated Press Raúl Benítez, profesor de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Captura significativa
La DEA felicitó a México por detención de Gómez diciendo que el capo manejaba "una de las redes de drogas y criminales más crueles y violentas del mundo".
El arresto es el último de una seguidilla, ocurrida en el gobierno de Peña Nieto, que ha sido agresivo con la captura de capos de la droga, incluyendo el jefe de jefes, Joaquín "El Chapo" Guzmán, en 2014.
De los principales líderes criminales de México, sólo Ismael "El Mayo "Zambada, del cartel de Sinaloa, sigue en libertad.
La semana había comenzado con tensiones cuando el director de cine, Alejandro González Iñárritu, dijo, al aceptar un premio Oscar, que esperaba que México consiguiera el gobierno que se merece. Pocos días después, el papa Francisco se refirió a un incremento del narcotráfico en Argentina como un proceso de "mexicanización" y Donald Trump propuso que dejasen de hacerse negocios con el país.
"Se trata de una captura significativa porque (Gómez) es un actor importante", dijo Eric L. Olson, analista especializado en México y criminalidad organizada del Centro Woodrow Wilson de Washington.
Agregó, sin embargo, que a las capturas "hay que ponerlas en perspectiva... Podría desatar más violencia y más conflictos, aunque es difícil imaginarse Michoacán yendo aún peor".
No está claro quién va a suceder a Gómez en la organización que aún opera en el estado michoacano, donde grupos de autodefensa luchan entre sí y con la policía militar y federal. Lo más probable será una "atomización y dispersión" del cartel, dijo el analista Benítez.
Un depredador
De profesión maestro, Gómez inició su carrera delictiva traficando marihuana. En 2005, "La Tuta" se convirtió en uno de los líderes de La Familia, un grupo ilegal que se presentó en Michoacán como una organización justiciera que limpiaría al estado de criminales y del que después saldrían Los Caballeros Templarios.
Estos últimos controlaban el puerto de Lázaro Cárdenas, en el Pacífico, por donde introducían precursores químicos para el narcotráfico y exportaban minerales. Tras el surgimiento de las autodefensas, perdieron sus principales fuentes de ingresos y su influencia comenzó a decaer.
"La Tuta", necesitado de dinero, intensificó entonces el cobro de extorsiones a la población. "Era un depredador", dijo Benítez.
Una nueva organización, denominada Los Viagras, podría suceder a Los Templarios en el control de la zona, según un mensaje hecho público por el propio Gómez en el que detalló que "hacen cosas peores que las que hacíamos los Templarios".
Pero el principal perjudicado por el arresto de Gómez podría ser el vecino estado de Guerrero, centro de la producción de amapola, un producto cada vez más valorado por las organizaciones criminales debido al aumento del consumo de su droga derivada, la heroína, en Estados Unidos.
Criminal de clase
Nacido el 6 de febrero de 1966, Gómez era simpático, extrovertido y hablador, algo poco habitual entre los grandes capos. Se autodenominaba un criminal "de clase alta" y en más de una ocasión propuso pactar con el gobierno. En otras ocasiones acusó a las autoridades de apoyar a grupos rivales.
Una resolución de acusación del Departamento de Justicia de Estados Unidos en 2009 decía que Gómez podría estar detrás del asesinato de 12 policías federales mexicanos, cuyos cuerpos fueron encontrados en julio de ese año cuando operaba para el cartel de La Familia.
Los residentes de Arteaga, su ciudad natal ubicada en las colinas de Michoacán, dicen que era un hombre de origen humilde, que calzaba sandalias y daba dinero a los pobres para que pudieran comer, vestirse o ir al médico. Dijeron, incluso, que era árbitro de disputas como accidentes de tránsito o peleas familiares por manutención infantil.
"Somos un mal necesario", dijo en un video en el que se dirigía a un grupo de ciudadanos de un pueblo michoacano. "Desafortunada o afortunadamente, estamos aquí. Y si no estuviéramos nosotros, vendría otro grupo".
El célebre prófugo aparecía con frecuencia ya sea arengando a su grupo por radiofrecuencias o contactando vía telefónica a canales de televisión o estaciones de radio.
El único otro capo prófugo que habla con los medios es Ismael "El Mayo" Zambada, uno de los líderes del cártel de Sinaloa, que ha otorgado una sola entrevista de prensa.
Como líder de Los Caballeros Templarios, Gómez emitió panfletos que fueron repartidos en autobuses en 2011 mientras el cártel buscaba crear una base social. El "código de conducta" indicaba que sostenían una guerra contra la pobreza, la tiranía y la injusticia, mientras eran culpados de asesinatos, extorsión y narcotráfico.
Nexos políticos
En una entrevista con MundoFox, la cadena en español de News Corp., Gómez reconoció haber cometido muchos delitos pero aseveró nunca haber matado a una persona inocente. También sostuvo que no le tenía miedo a la muerte y que prefería morir que ir a prisión.
Una cadena británica de televisión también logró entrevistar al narcotraficante. Ahí, aseguró que siempre fue altruista: 'mi madre me dijo que yo nunca iba a tener dinero porque todo lo regalaba".
Relacionarse con él siempre generó grandes escándalos. Gómez acusó a la senadora federal María Luisa Calderón, hermana de quien fuera el presidente de México, Felipe Calderón, de buscar su apoyo a través de un asesor cuando compitió por la gobernación de Michoacán en 2011. Mostró un vídeo en el que se le veía hablando con un nombre que, afirmó, trabajaba para Calderón. El partido dijo que no tenía relación con él.
En la grabación de una conversación telefónica entre un diputado federal y el sospechoso de narcotráfico, filtrada y hecha pública por un canal de radio, se escuchaba cómo se apoyaban. Se abrieron cargos contra el diputado, César Godoy, que se encuentra prófugo, acusado de lavado de dinero.
(Información de The Associated Press)