A. Hernández/Milenio
MÉXICO, D.F.- El secretario de Hacienda, Luis Videgaray, dijo que la libre flotación del tipo de cambio en México ayuda a evitar choques externos en la economía mexicana, con lo que la decisión del Banco de México de suspender la subasta diaria de dólares obedece a que se han reestablecido las condiciones cambiarias internacionales.

Al participar en la octava Cumbre Financiera Mexicana organizada por LatinFinance, el funcionario destacó que el país se ha acostumbrado a tener un tipo de cambio libre, con el cual se enfrenta en mejores condiciones la problemática que se vive en otras naciones.

“Es un mecanismo que permite absorber choques financieros cuando hay disrupciones en los mercados financieros globales, que en lugar de trasmitirse en la economía real, afectar empleos o inversiones, se absorbe en el mercado cambiario; ya sea a través de la apreciación o depreciación y por eso nos hemos acostumbrado a un tipo de cambio que fluctúa, es parte de nuestra normalidad y salud de la economía mexicana”, destacó.

Videgaray informó que el gobierno mexicano emitió en Europa un bono a 10 años por mil 600 millones de euros, con lo que el país regresa a estos mercados tres años después de haber hecho una colocación. 

“Además, con esta colocación el gobierno federal captó recursos con el bono de referencia en euros al costo de financiamiento más bajo en la historia, a una tasa de rendimiento de 2.81 por ciento”, destacó.

Según el titular de Hacienda, esto representa el interés que hay en el exterior por la estabilidad económica del país y por el futuro alentador que se vislumbra ante las reformas propuestas a través del Pacto por México y su posible aprobación por parte del Congreso.

Al respecto, Videgaray destacó la necesidad de aprobar una reforma hacendaria que disminuya la informalidad en el país, pues es una de las actividades que ha impactado la productividad y ha viciado el uso de algunos programas sociales.

“Por ejemplo, el programa de pensión para adultos mayores exige como condición para ser beneficiario no haber cotizado ni tener una pensión del IMSS o del ISSSTE, y se tiene que comprobar por escrito. Hemos llegado al extremo de que para ser beneficiario de un programa social, pedimos un certificado de informalidad”, explicó.

Así, aseguró que estas medidas deben cambiar su orientación para convertirse en inductores de la formalidad, tanto en materia de vivienda, salud pública, como es el caso del Seguro Popular, y los programas de combate a la pobreza.

Videgaray resaltó también los beneficios de la aprobación de las reformas en telecomunicaciones y energética, ya que pueden generar una baja en el costo de los servicios.