Mariposa Monarca, experta en la capacidad de adaptarse

A pesar de su aspecto frágil, el insecto es capaz de soportar fuertes vientes y grandes cambios.

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Las mariposas adultas reproductivas viven de cuatro a cinco semanas. (Archivo/Notimex)
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Agencias
MÉXICO, D.F.- La mariposa monarca, además de su belleza, se caracteriza por su longevidad y resistencia, pero en especial, por ser el insecto capaz de adaptarse a fuertes vientos y grandes cambios.

Una de las ventajas de la monarca, señala Eduardo Rendón, coordinador del Programa Mariposa Monarca de WWF, es que a pesar de su apariencia frágil, son “las especies sobre la tierra, que decimos los biólogos, con una plasticidad genotípica alta, que no es otra cosa que su capacidad de adaptarse, adecuarse a muchas condiciones de clima y de vegetación, estas mariposas por lo tanto, son unas expertas”.

Las mariposas adultas reproductivas viven de cuatro a cinco semanas. Sin embargo, una de las maravillas de la mariposa monarca es la “Generación Matusalén”. Cuando se acerca el otoño en Canadá y Estados Unidos nace una generación especial que no es igual a la de sus ancestros.

A diferencia de sus padres, abuelos, y tatarabuelos, que tuvieron vidas efímeras de unas semanas o hasta un mes, las mariposas migratorias vivirán hasta siete u ocho meses. Esto significa que si nosotros viviéramos un promedio de 75 años, nuestros hijos vivirían 525 años.

Así, con apenas medio gramo de peso en promedio, las monarcas pueden viajar cuatro mil 200 kilómetros de Canadá y Estados Unidos a México para pasar el invierno y de regreso.

En este sentido, Rendón dejó en claro que la mariposa monarca como especie “no va a desaparecer, es una especie cosmopolita, prácticamente vive en todos los continentes, exceptuando en los polos y se puede encontrar por esta capacidad de adaptabilidad en prácticamente cualquier lugar”.

Es decir, que “la especie no va a extinguirse, lo que está en riesgo es la migración porque se están eliminando las plantas (algodoncillos) de las que se pueden alimentar y en todo caso, lo que estaría en riesgo, sería la hibernación en México”.

Los purépechas la consideraron el alma de los muertos e interpretaban su llegada como el anuncio de la visita de los difuntos

Los pobladores de las comunidades aledañas a los bosques de hibernación en Michoacán y el estado de México, han tomado muy en serio el mensaje de la monarca, en donde la naturaleza y astucia, bastan para subsistir.

Diego, guía en el Santuario de Sierra Chincua, Michoacán, relata como dio un giro a su vida luego de que antes de este empleo, se dedicara a la tala clandestina en los bosques de pino y oyamel de la región.

“Lo fuerte de nosotros era la tala clandestina pero poco a poco nos fuimos preparando y hoy (en los santuarios) es ya una fuente de empleo, es como un soporte para la comunidad y para todos aquí en los alrededores. Estamos en una época en donde la tala no es lo que nosotros deberíamos de hacer sino que hay más facilidades, hay otros medios, otros atractivos dentro de este parador turístico”.

Mientras tanto, Serafina Gabriel, en el Ejido El Capulín, en el municipio Donato Guerra, recolecta ocoxal (la hoja de pino), para ella, este material es “mágico”, porque puede elaborar diversa artesanía, como canastas, floreros, cestos, cajas y tortilleros, mismos que vende a los turistas que llegan a visitar a la monarca.

“Vino una maestra que nos enseñó, y yo le decía a mi señor, yo quiero enseñarme ocoxal porque luego no tiene uno para comer”; cuenta Serafina, quien dice que gracias a estos productos puede mantenerse durante una temporada, y “cuando mi hijo trabaja, también me da, pero ya que abren el parque, ya pago el permiso y ya tengo que venir a vender”.

Eloy González, también artesano de ocoxal, dijo que al recolectar las ramitas que caen de los pinos, los artesanos apoyan para que la capa de estas hojas no crezca demasiado, y “cuando hay incendios ya no agarra muy gruesa la capa de hojas, entonces el riesgo es menor”.

Además, en cada invierno, alguien tiene que contar la extensión de hectáreas de mariposa monarca, Genaro Mondragón, técnico de la Conanp, conocido como el sabueso del santuario de Sierra Chincua, en Michoacán, es el responsable de hacerlo cada invierno.

“La finalidad es identificar las que fueron muertas por depredación, lo que hacemos aquí es recolectar todo lo que está y ya en la oficina, hacemos la identificación y conteo de cuantas fueron depredadas y cuantas de muerte sin causa aparente, es decir, que están completas pero están muertas”.

En este sentido, Genaro mostró el caso de mariposas monarca que les falta el abdomen, las que fueron depredadas por una ave, “a ésta ya no se la pudo comer y le quitó una parte de la cabeza, entonces, lo que se hace en el conteo es identificar cuantas hembras depredadas y cuantos machos son depredados”.

Además, para que las mariposas vuelen, se requieren los rayos del sol y frío suave; porque en días nublados, las mariposas hibernan, enclostándose en forma de racimo en los pinos y oyameles. Lo que llega a causar la molestia de los turistas.

Audelia de 73 años, ejidataria y guía de turistas en el santuario Sierra Chincua, en Michoacán, dice que en general los visitantes “se portan muy bien pero nomás, como ahorita que no vuela la mariposa, pues hay unos que si se enojan, luego ya comienzan a decir que pues que nosotros no les decimos pero pues francamente, luego les decimos pues ahora que está nublado no vuela la mariposa, hay unos que si comprenden, dicen, pues si, como va a volar si está nublado, tienen frío”.

En este Marco, Eduardo Rendón de WWF, remarcó que como sociedad, en el contexto evolutivo de la mariposa monarca, “tendríamos que aprender a adaptarnos a lo que está pasando con el clima, a los retos que estamos enfrentando, también a hacerle frente con base en adaptaciones, y no me refiero a que cambiemos de forma, de colores y ese tipo de historias, a que cambiemos de conducta”, sentenció.

Sabías que...

El ciclo biológico de la mariposa la caracteriza como insectos holometábolos, es decir, presentan todas las etapas de desarrollo: un huevo que da lugar a la larva, la cual experimenta cinco etapas de crecimiento en las que aumenta sustancialmente en tamaño y peso. Después la larva se transforma en pupa o crisálida, en cuyo capullo tiene lugar la metamorfosis de la que finalmente emergerán las mariposas adultas.

El nombre científico de la monarca es Danaus plexippus. Danaus significa dormilón y plexippus transformación. Las mariposas son capaces de asimilar los tóxicos y almacenarlos en su exocutícula (piel de los insectos), lo que las defiende de sus depredadores.

Los purépechas la consideraron el alma de los muertos e interpretaban su llegada como el anuncio de la visita de los difuntos; Los mazahuas y otomíes la asociaron a los ciclos de producción agrícola llamándola la cosechadora.

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