Agencias
TOLUCA, Edomex.- El embajador de Noruega en México, Arne Aasheim, afirmó que Petróleos Mexicanos (Pemex) tiene futuro para su crecimiento y que México no debe copiar ningún modelo de reforma energética, sino lograr un modelo "mariachi" o propio.

"Hemos visto la propuesta de una reforma energética por parte del gobierno federal y debe desarrollar una propuesta propia para su situación. Con 17 años en este país me siento casi tan mexicano como noruego y le deseo lo mejor. México tiene los recursos, nada más hay que sacar el mejor provecho de ellos y beneficiar a todos los mexicanos con ellos", refirió.

Durante la conferencia "Ética financiera de un país productor y exportador de petróleo; el caso Noruega", dictada en la Casa Toluca del Colegio Mexiquense, aseveró que en los últimos seis meses mantuvo contacto con legisladores mexicanos, integrantes de la OCDE y el Secretario de Energía.

Refirió que con ellos tuvo la oportunidad de intercambiar experiencias sobre el éxito de la producción de hidrocarburos en su país en donde prevalece la asistencia de empresas extranjeras.

"No era posible tomar decisiones sobre la exclusividad de empresas noruegas encargadas de explotar este recurso, si embargo, hemos mirado por encima de los hombros a compañías internacionales, de modo que no hay nada más una compañía que puede explotar un bloque sino son consorcios", expuso.

Precisó que tras un periodo de aprendizaje, Noruega camina de manera independiente, pero sigue con el modelo de empresa que permite la participación de otras naciones en la explotación de sus pozos.

Siempre mantiene el estricto control en la comercialización, y pues, otras empresas son expertas en aguas profundas o en yacimientos maduros.

"No es posible, por lo menos en Noruega y dudo que lo sea en México, que una sola compañía atienda todo y sea especialista en cada rango. Sin embargo, México tiene mucha experiencia", apuntó.

Total transparencia

El embajador afirmó que es más fácil verlo desde la perspectiva de un país que ha sido organizado, disciplinado, pobre durante casi toda la historia, pues el crecimiento económico de Noruega se detonó gracias a la explotación de la energía hidroeléctrica a finales del siglo XIX.

"Hemos aprendido de mucho y de otras compañías. La privatización para nosotros no es ningún problema porque mantenemos el control y hay total transparencia sobre su uso", refirió.

Expresó que si este país logra consolidar un efectivo mecanismo de transparencia, así como de vigilancia sobre el ingreso de los recursos por la venta del crudo, entonces habrá un avance significativo, que permitirá el desarrollo de esta reforma energética.