México pierde disputa por maíz transgénico ante Estados Unidos
El panel del T-MEC determinó que las medidas no se basan en ciencia y violan compromisos comerciales
México perdió la disputa comercial contra Estados Unidos por el uso de maíz genéticamente modificado, luego de que un panel del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) concluyera que las medidas mexicanas no están basadas en evidencia científica y restringen el acceso al mercado. Así lo informó la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR).
La controversia surgió en 2023, cuando el gobierno mexicano prohibió el uso de maíz transgénico en la harina y masa para tortillas, argumentando riesgos a la salud pública y la protección de los derechos indígenas.
Estados Unidos consideró que esta decisión violaba los compromisos del T-MEC y solicitó la formación de un panel. El informe final, emitido el 20 de diciembre, dio la razón a Estados Unidos en las siete reclamaciones legales presentadas, y México tiene 45 días para acatar la resolución.
El @USTradeRep anuncia que México perdió el panel de resolución de controversia en materia de maíz geneticamente modificado. @SecVilsack dice que: "el enfoque de México hacia la biotecnología no tiene base científica o estándares internacionales". Previsible pero penoso. pic.twitter.com/Vk94jHh1d5
— Rodrigo Pacheco (@Rodpac) December 20, 2024
Katherine Tai, representante comercial de Estados Unidos, afirmó que la decisión confirma las preocupaciones sobre las políticas biotecnológicas de México, subrayando la importancia de prácticas comerciales basadas en la ciencia.
El secretario de Agricultura estadounidense, Tom Vilsack, aseguró que las medidas mexicanas contradicen décadas de investigaciones que avalan la seguridad del maíz transgénico. Por su parte, el negociador agrícola jefe de la USTR, Doug McKalip, destacó la necesidad de evitar políticas que afecten el comercio de productos agrícolas.
México acata el fallo del panel del T-MEC
En respuesta, las secretarías de Economía y Agricultura de México declararon que, aunque no comparten la resolución, respetarán el fallo del panel en el marco del T-MEC. México defendió que sus medidas están alineadas con principios de salud pública y derechos indígenas.
Esta resolución refuerza el sistema de solución de controversias del T-MEC, clave en casos como las reglas de origen del sector automotriz, que previamente resultaron favorables para México.
(Con información de Reforma)