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MONTERREY, Nuevo León.- Tres reos muertos y al menos 14 lesionados del penal del Topo Chico fue el saldo de un frustrado motín, aparentemente ocasionado en protesta por el traslado de varios de sus compañeros al Cereso de Apodaca.

A 110 días del motín que dejó 49 muertos la medianoche del 10 de febrero, anoche regresaron los disturbios al reclusorio y alrededor de las 21:24 se escucharon detonaciones de arma de fuego con saldo de tres internos muertos, de acuerdo a la versión del secretario de Gobierno, Manuel González.

La movilización de fuerzas federales y estatales que rodearon el reclusorio concentró el Ejército, la Policía Federal, así como decenas de patrullas de Fuerza Civil, Policía Militar, además de elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones para resguardar las labores de los elementos de Servicios Periciales y del Ministerio Público. 

Los elementos federales y estatales rodearon el reclusorio y bloquearon el acceso en varias calles a la redonda, en previsión de una fuga, además de facilitar las labores del personal forense y recolector de evidencias.

Los fallecidos fueron identificados como Edelmiro Guadalupe Gaspar Rubio, Jesús Ledezma Ramírez y Javier Orlando Jacinto Puente, quien además era identificado como Jesús Puente Galindo, Javier Puente Galindo y Francisco Javier Puentes Macías, apodado El Maruchan, El Javi o El Chocorrol.

Fueron reclusos del lugar quienes reportaron los hechos.

Jacinto Puente era identificado como el líder del Cartel del Noreste, además de que se ostentaba como el hombre fuerte en el control del reclusorio, dominio que le disputaban algunos de los que presuntamente fueron trasladados al Cereso de Apodaca.

Aparentemente esa situación molestó a los reos que se quedaron en el penal del Topo Chico, donde supuestamente trataron de armar una fuga e iniciaron los disturbios.

Por esa situación, elementos de la Dirección de Criminalística y Servicios Periciales y agentes del Ministerio Publico entraron al lugar para recabar evidencias.

Así como elementos de Fuerza Civil antimotines, quienes dispersaron abundante gas lacrimógeno en diversos puntos del centro penitenciario para tratar de calmar la situación.

Pasada la medianoche, familiares de los reos bloquearon la vialidad de la avenida Aztlán, solicitando más información a las autoridades. 

El secretario general destacó que las agresiones entre los reos se dieron con armas blancas.

El Maruchan, líder del Cartel del Noreste, tenía pendiente un expediente criminal que enfrentaba ante las autoridades federales y en el que era procesado junto con Juan Pedro Saldívar Frías,El Z27, quien fue uno de los orquestadores del motín que se registró en febrero.

Además de la causa federal, El Maruchan enfrentaba otros procesos y una carpeta judicial por su participación en los violentos hechos de febrero del 2016, junto con otros 11 internos, por el homicidio calificado de los 49 reclusos asesinados en aquella ocasión. 

A decir de Manuel González, se tiene prevista una rueda de prensa entre las 10:00 y 11:00 de hoy para tener el relato completo del móvil de esta riña.