Bertina Morales Santiago, oriunda del pueblo Ñu’savi en la Montaña Alta de Guerrero, falleció en un hospital de Acapulco el pasado 12 de junio. 

Sus familiares y la activista Elvira García Rodríguez acusan que su muerte se debió a una presunta negligencia médica mientras era atendida por un embarazo de cinco meses.

En la comunidad de Dos Ríos, en el Municipio de Cochoapa el Grande, donde residía la mujer de 38 años de edad, los habitantes cuentan con una clínica del IMSS Bienestar recién inaugurada que, sin embargo, no tiene médicos ni medicamentos y tampoco una ambulancia propia, de acuerdo con la activista Elvira García.

Por lo que el pasado 6 de junio, desde que Bertina comenzó a tener malestares, familiares la trasladaron en un vehículo rentado durante siete horas hasta llegar al Hospital de Ometepec, donde no recibió atención médica pese a presentar síntomas como la pérdida de líquido amniótico.

El sábado 8 de junio, a la 1:00 de la tarde, Bertina volvió al hospital y fue atendida por un médico pasante que la inyectó para que supuestamente pudiera expulsar el feto.

"A las 9 de la noche Bertina se puso más grave y llegaron más médicos para atenderla pero le dijeron a la familia que era necesario que fuese trasladada al Hospital de Acapulco o de Chilpancingo", refirió la activista.

Elvira García indicó que ese día habló por teléfono con la secretaria de Salud, Aydé Ibarez Castro, quien ordenó el traslado de la mujer al Hospital Donato G. Fonseca, en Ciudad Renacimiento, Acapulco, a 196 kilómetros de distancia. 

"En la madrugada del domingo 9 de junio Bertina Morales fue intervenida quirúrgicamente y le extrajeron el bebé muerto, pero ella quedó muy grave", dijo.

Por desgracia, la mujer murió tres días después.

"Nosotros creemos que cuando el sábado 8 de junio ingresó Bertina Morales al Hospital de Ometepec el bebé ya había muerto y los médicos en vez de extraerle de manera inmediata el niño ahí lo dejaron y por eso ella también falleció", acusó la activista.

García Rodríguez, quien ha encabezado protestas en la capital guerrerense para que los centros de salud funcionen adecuadamente, anunció que el próximo lunes 17 de junio presentará una denuncia formal por presunta negligencia médica contra los médicos de Ometepec.

"Aquí en las comunidades de Cochoapa si hay clínicas, pero de qué sirve si solamente es el puro cascarón, bien pintaditas pero no hay médicos, medicamentos y sólo la atiende una enfermera", refirió la activista.

Aseguró que durante los días que Bertina fue atendida en los hospitales de Ometepec y Acapulco, sus familiares pagaron los medicamentos.

En entrevista, la activista le pidió al presidente y a la gobernadora Evelyn Salgado que recorran las comunidades de la Montaña Alta para que observen la situación desastrosa en materia de salud.

Con información de Reforma