Agencias
CIUDAD DE MÉXICO.- De acuerdo con la Quinta Encuesta Anual sobre Ahorro, realizada por la Asociación Mexicana de Administradoras de Fondos para el Retiro (Amafore), solo 28 por ciento de las mujeres encuestadas ahorra para este fin, frente a 40 por ciento de los hombres.

El presidente ejecutivo de la Amafore, Carlos Noriega Curtis, señaló que el sexo femenino considera que son los varones los responsables del ahorro para el retiro de ellas, “lo que es algo sumamente delicado, porque la mujer está en espera de que alguien más vea por su retiro”.

Lo cual, señaló, podría ser natural, porque si durante su vida joven la mujer se dedicó a cuidar a su familia sin recibir una remuneración, la expectativa es que alguien más, como sus hijos o su marido, se haga responsable de ellas durante el retiro, según publica Notimex.

Por lo anterior, comentó que los resultados de la encuesta evidencian que las mujeres enfrentan retos distintos a nivel personal y laboral, lo que hace imperativo analizar su pensión y su retiro desde una perspectiva de género.

Carlos Noriega destacó la necesidad de contar con una política de Estado que asegure la igualdad entre hombres y mujeres, en particular en cuanto a política laboral y de remuneración se refiere.

Asimismo, que se pague el trabajo hecho en casa, porque debe ser considerado como una jornada laboral, además de fomentar la no dependencia financiera de la mujer.

Noriega Curtis aseguró que el rol de la madre que trabaja fuera de un lugar y su actitud frente al ahorro son fundamentales para que otros miembros de la familia ahorren para el retiro.

En ese contexto, detalló que en los niveles socioeconómicos más altos hay un mayor nivel de ahorro formal, ya que resalta el hecho de que en ese estrato no hay diferencias significativas entre hombres y mujeres, en virtud de que 87 por ciento de ambos sexos ahorra de manera formal.

Eso da lugar a la hipótesis de que las diferencias entre géneros se presentan de manera más pronunciada cuando se conjugan con otras desigualdades sociales.

Carlos Noriega expuso que la participación económica de las mujeres, así como su empoderamiento financiero, constituye un factor de desarrollo para el país y no únicamente para ellas en lo individual.

Lo anterior, porque los comportamientos financieros maternos funcionan como un catalizador de desempeños económicos positivos en las generaciones futuras.

Asimismo, señaló que los resultados de la encuesta revelan que mientras los varones como trabajadores y proveedores tienen mayores posibilidades de pensar en su retiro, las mujeres tienden a pensar en los demás.

Ello, como extensión de sus actividades cotidianas para el bienestar y disfrute de los otros y no sólo de ellas mismas, lo que le lleva a una menor capacidad de ahorro.