En los últimos meses, Apatzingán, Michoacán, se ha visto inmerso en una ola de violencia que incluye enfrentamientos entre grupos criminales y civiles armados contra las fuerzas de seguridad. 

Este panorama de inseguridad ha tenido un impacto directo en la vida cotidiana, incluyendo el cierre de 34 planteles educativos, según lo confirmó la regidora María del Carmen Zepeda Ontiveros.

"Están cerradas las escuelas, todas las primarias, los jardines de niños, los maestros, no está yendo nadie", señaló la funcionaria en una entrevista para el medio Post Data. 

Zepeda destacó que los datos provienen de la Unidad de Servicios Regionales Educativos de Apatzingán y detalló que comunidades como Loma de los Hoyos, Puerta de Alambre, El Alcalde, Las Bateas, Llano Grande, El Tepetate y El Capire, son algunas de las más afectadas por el cierre de escuelas.

El pasado 8 de enero, la alcaldesa Fanny Arreola Pichardo había declarado que no estaba contemplada la suspensión de clases a pesar de la ola de violencia. 

"Por ahora no hemos emitido ninguna alerta. Estuvimos con algunas autoridades locales de escuelas, tanto de Telesecundaria y Telebachillerato considerando si era necesario suspender las clases. Por el momento no se tomó la determinación de hacerlo así", señaló. 

Sin embargo, los recientes hechos parecen haber obligado a las autoridades locales a reconsiderar la gravedad de la situación.

La regidora Zepeda, además, envió una carta en diciembre de 2024 al gobierno estatal solicitando asistencia humanitaria para comunidades como Puertecitos, donde numerosos habitantes han tenido que abandonar sus hogares por temor a ser víctimas de la violencia. 

“Un número indeterminado de personas se vieron en la necesidad de salir repentinamente de sus domicilios, buscando refugio en la cabecera municipal o en otros poblados, donde contarán con el auxilio de familiares, personas conocidas o gente de buena voluntad”, detalla el documento citado por Proceso.

Violencia en Apatzingán: impacto no se limita al cierre de escuelas 

Durante las primeras semanas de 2025, se reportaron explosiones de minas terrestres que causaron la muerte de al menos tres personas.

A esto se sumaron los hallazgos de cinco cabezas humanas entre el 14 y el 18 de enero, acompañadas de mensajes dirigidos al grupo criminal de los Caballeros Templarios. 

Con información de Infobae