Después de la fuerte caída en los precios del petróleo, el peso mexicano experimentó un desplome que no se había visto al menos en 3 años, desde enero de 2017.

De hecho, la moneda nacional alcanzó los 21.1730 por dólar, al tener una pérdida del 4.26 por ciento respecto a los 20.11 en que cerró el viernes, según el Banco de México (Banxico).

Además, fue este domingo 8 de marzo cuando se pudo observar una cotización del dólar de 21.35, una cantidad que sólo se había alcanzado en 2017.

La tendencia a la baja de la divisa que arrancó a principios de febrero, amenaza incluso con romper el techo de los 22 pesos, récord alcanzado durante las primeras semanas del mandato de Donald Trump.

El desplome del crudo –tanto la cotización del Brent como la del Texas, en Estados Unidos caían a doble dígito, hasta el entorno de los 35 dólares– ha golpeado al resto de productores de la región.

Pero el impacto en México ha sido mucho mayor que, por ejemplo, el sufrido por el peso colombiano (-1.3%) o el real brasileño (0,3%).

Lo anterior se suma al análisis de economistas, quienes estiman que la inflación general de febrero se ubique entre 0.25% y 0.27%, con lo que la inflación anual subiría a un rango entre 3.52% y 3.55% desde, 3.24% en enero.

En tanto, para la subyacente calculan un repunte de 0.36%, con lo que en medición anual repuntaría a 3.65% desde 3.73%.

(Con información de El Economista y El País)