Apolonia Amayo y Daniel Hernández/Milenio
MÉXICO, D.F.- Los dos hombres linchados anoche en Ajalpan, Puebla, eran encuestadores, informaron autoridades municipales. El alcalde Gustavo Lara Torres y el director de Seguridad municipal, José Manuel González, dijeron que los dos hombres, de entre 30 y 35 años, eran originarios del Distrito Federal y se acreditaron como encuestadores.

González explicó que policías municipales los detuvieron porque vecinos reportaron que estaban haciendo muchas preguntas.

Los uniformados hablaron con los dos sospechosos, los trasladaron a los separos y ahí se determinó que no había delito.

Los dos detenidos se identificaron con una credencial de elector y como trabajadores de una empresa de Marketing del Distrito Federal, así como de una universidad.

Uno de los detenidos habló por teléfono con su jefe, le informó lo que estaba ocurriendo y éste pidió que le permitieran llegar a Ajalpan para que demostrara que no eran delincuentes.

Sin embargo, la gente enfurecida los sacó a la explanada municipal, donde los golpearon, les rociaron gasolina y prendieron fuego.

"No había un delito para ponerlos a disposición, sólo era la gente que estaba inquieta por el tipo de encuesta que estaban haciendo y nada más, no había otro señalamiento. Vino una chiquilla, que supuestamente la habían intentado jalar. Pasó la chiquilla. Los vio delante de las personas adultas, dijo no son", indicó el director de Seguridad municipal.

Por su parte, El procurador de Justicia de Puebal, Victor Carrancá Bourget, dijo que los dos hombres que murieron linchados no han sido identificados y aún se desconoce si estaban cometiendo algún ilícito.

La gente que estaba afuera del Palacio Municipal, donde están los separos, comenzó a lanzar piedras.

El alcalde dijo que el hecho dejó, como saldo preliminar, 30 personas lesionadas, la mayoría policías municipales. Además la presidencia fue declarada pérdida total.

Los inconformes se enfrentaron con elementos de Seguridad Municipal, prendieron fuego a patrullas y destruyeron ventanas de la oficina de la delegación de la Procuraduría General de Justicia.

Lara Torres dijo que exigirá que se aplique la ley a los responsables del doble homicidio, así como del saqueo e incendio del Palacio Municipal.

Calificó los hechos de reprobables y dijo que se mantiene en lucha por corregir todos estos sucesos donde la justicia se tiene que hacer valer.

El munícipe dijo que la intervención de la policía estatal fue tardía, detalló que desde las siete de la noche pidió el apoyo de la fuerza pública, sin embargo cuando él llegó a Ajalpan, procedente de la capital de Puebla, encontró a la policía ministerial en la entrada de la ciudad.

La policía no lo quiso acompañar, argumentando que no tenía órdenes de intervenir.

El alcalde dijo que pidió la intervención de la Dirección de Gobierno cuando los dos encuestadores aún estaban con vida, sin embargo no les dieron el apoyo.

El saldo de los hechos violentos fue de dos hombres asesinados, 30 personas lesionadas, incluyendo a un juez de paz y al regidor de Gobernación, Joel González García.

Sospechosos "no han sido identificados" 

El procurador de Justicia, Victor Carrancá Bourget, informó que los dos hombres que murieron linchados en el municipio de Ajalpan ayer por la tarde no han sido identificados y aún se desconoce si estaban cometiendo algún ilícito.

El procurador señaló que luego de que la Policía Estatal logró controlar la situación se iniciaron las diligencias correspondientes y la carpeta de investigación por el delito de homicidio:

"Todavía no están identificadas las dos personas, no ha comparecido ningún familiar, eso nos permitirá establecer su procedencia, qué es lo que hacían ahí, confirmar si efectivamente eran encuestadores o no, es un dato que en la carpeta de investigación no tenemos confirmado".

Explicó que como parte de las diligencias se está buscando a la persona a la que presuntamente le intentaron robar a una menor de edad para determinar la mecánica de los hechos.

Los policías municipales  rindieron su declaración en la que señalaron a algunas personas de incitar a cometer el asesinato de los dos jóvenes a quienes después les prendieron fuego.