Milenio
GUADALAJARA, Jal.- Un conflicto entre un grupo delictivo de Michoacán con dos células criminales de los municipios de Ayotlán y La Barca, habrían derivado en la privación de la libertad y homicidio de 13 personas, para luego arrojar los restos al río Lerma, según la Fiscalía General del Estado (FGE).

Tras encabezar un operativo en La Barca, el fiscal Eduardo Almaguer Ramírez dio a conocer que en los hechos también se involucra al subdirector de la policía de La Barca identificado como Nicolás "N", quien se encuentra prófugo, y al primer comandante de ese cuerpo policial, José Luis "N", quien está a disposición de la FGE

De acuerdo con las indagatorias, el presunto responsable de haber ordenado la privación ilegal de la libertad y asesinato de estas personas fue un sujeto de apodo El Chulo, dirigente de una organización criminal en esta zona colindante entre Jalisco y Michoacán cuya base de operaciones es Vista Hermosa.

"Las personas por las que hay una denuncia por desaparición o privación ilegal de la libertad, sabemos que pertenecen a una célula delictiva denominada Los Bolillos por parte de La Barca y de Los Bayos por parte de Ayotlán mismos que de acuerdo a las investigaciones fueron privados de su libertad o en su caso desaparecidos", dijo el fiscal.

Reiteró que hasta el momento se ha localizado un cadáver en el río Lerma en Michoacán, mientras que en la desembocadura de este afluente en el Lago de Chapala, han sido localizados 12 cuerpos más, uno de ellos perteneciente a una persona del sexo femenino.

Personal de Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses inmediatamente se avocó a determinar la causa de la muerte y la identificación de las víctimas; el fiscal aseguró que hasta el momento se tiene la identificación parcial de tres.

Las investigaciones se robustecieron luego que el jueves por la noche una persona se presentó ante la autoridad investigadora para denunciar la desaparición de cuatro familiares, tres hombres y una mujer, mientras que ayer otros dos denunciantes reportaron la desaparición de otras personas.

Tras estos hechos, la FGE realizó al menos tres cateos a ranchos de la zona donde se detuvieron a dos personas en posesión de droga, que pudieran estar relacionadas con el caso. Además, implementó un operativo especial consistente en la permanencia de la Fuerza Única en La Barca, así como implementar un filtro de seguridad en la frontera con Briseñas, Michoacán.