Agencias
CIUDAD DE MÉXICO.- El declive de los precios del petróleo, el terremoto de Ecuador en mayo de 2016, el virus del Zika y el estreno de la serie Lucifer en el canal Fox de Estados Unidos. Estas son las señales de con las que Jim Bakker, el controversial líder religioso de Estados Unidos condenado a 45 años de prisión por estafar a sus seguidores en 1988, interpreta que el fin del mundo se acerca. 

Un juez federal redujo aquella sentencia del televangelista (predica por televisión) a cinco años y casi dós décadas después ha regresado a la pantalla chica: ahora vende cubetas de comida para sobrevivir a una catástrofe mundial. La versión más reciente contiene una dotación de comida con sabores mexicanos y tiene un nombre nada apocalíptico, Fiesta Bucket.

Este video muestra un fragmento de The Jim Bakker Show (que se transmite por televisión por cable en Estados Unidos), en el que presenta el producto. Puedes leer la traducción al español abajo.

"Hemos hecho algunas modificaciones a esta comida que a cualquier otra que hemos producido antes. Esta comida es tan buena que ha pasado la prueba prueba oficial mexicana: esta es la comida que los verdaderos mexicanos aprueban. No es comida de gringos, está muy buena, es increíble. Pero lo más importante es que algunos eventos están por llegar, tal vez no se traten del gran evento, del gran colapso, pero serán como un flechazo de advertencia. Estoy preocupado porque algo está por llegar".

La Fiesta Bucket fue lanzada al mercado el 17 de mayo. Contiene 15 paquetes que sellados pueden durar hasta 20 años, según la compañía de Bakker. Cada uno con diferentes porciones de ingredientes secos para preparar fajitas (de pollo deshidratado), enchiladas, tacos (de soya sazonada), huevos revueltos, tortillas, salsa, arroz, frijoles, totopos y queso amarillo, agregando solo agua. La cubeta está diseñada para alimentar a una persona por 30 días. Su precio es de 100 dólares.

Las versiones anteriores de las cubetas de comida incluyen platillos típicos de la cultura estadounidense como pizza, hamburguesas, macarrones con queso y hot cakes (pancakes o tortitas). 

“Queríamos ofrecer una versión con comida mexicana porque esta es muy popular en Estados Unidos”, comenta a Verne Jerry Jones, vicepresidente ejecutivo de The Jim Bakker Show vía correo electrónico.

“Las recetas fueron desarrolladas por un equipo de origen latino. No queríamos desviarnos mucho del sabor auténtico de esta comida, es decir de la que se puede encontrar en varias partes de Estados Unidos”.

Fiesta Bucket recibió el visto de bueno de las personas de origen hispano en el equipo de producción del programa, a lo que Bakker se refirió en su programa como la prueba oficial mexicana, explica Jones. 
“La comida también ha sido aprobada por los cinco hijos adoptivos de Jim y su esposa Lori que son de origen mexicano y latino”, agrega. 

“Ellos crecieron rodeados de la cultura latina y disfrutan la auténtica comida mexicana. Además fue aprobada por un panel catador de 12 personas, si el panel no aprueba una receta, no la ofrecemos”.

En la tienda en línea de The Jim Bakker Show aún no hay reseñas de la Fiesta Bucket. Nosotros no podemos ordenarla porque la tienda no hace envíos fuera de Estados Unidos.

Lo más cercano a una reseña de un experto independiente es un video en el que Greg Lauro, un chef neoyorquino prepara y prueba el contenido de una de las cubetas de Jim Bakker. Fue producido por la web Sploid. Ninguna de las recetas pasó la prueba del chef.

Lauro cuenta a Verne que se enteró de la existencia de estas cubetas a través de un amigo que trabaja en Gawker, empresa de medios a la que pertenece Sploid.

“Creo que estos productos están dirigidos a un mercado muy vulnerable, y quería mostrar algunas de las prácticas depredadoras de los televangelistas”, comenta vía correo electrónico.

El chef, quien trabaja en el restaurante Lavender Lake en Brooklyn, asegura que la comida de microondas es mucho mejor que la comida hecha con ingredientes de la cubeta. 

“La comida de microondas puede llegar a ser buena, pero ésta sabe tan mal, sino es que peor, que algunas de las peores comidas de microondas que he probado. Mis temores iniciales fueron confirmados: la comida simplemente no tiene sabor. Dudo mucho que la versión mexicana sepa mejor”.

Al respecto, Jones responde: “Como todos, él tiene derecho a opinar. Estamos orgullosos de nuestra comida de larga duración y somos unos de los principales proveedores en Estados Unidos”. El directivo añade: "La Fiesta Bucket cubeta ha obtenido una muy buena respuesta del público. Esperamos que sea nuestro producto más vendido”.